Los municipios deben trabajar y capacitarse para poder intervenir en el desarrollo de vivienda social, planeación urbana y distribución del suelo.
En una transmisión de Centro Urbano Home, Ignacio Carlos Kunz Bolaños, académico de la Universidad Nacional Autónoma de México, habló acerca del encarecimiento de la vivienda social y destacó que esto se debe en gran medida a que los propietarios del suelo lo venden a quien les resulta más eficiente, por lo cual intentan colocar ese suelo para las viviendas más costosas.
Sobre esto, Gabriela Quiroga, presidenta de El Colegio de Urbanistas de México, destacó que otro factor a considerar al hablar de vivienda social es que hay composiciones familiares que ya no requieren el típico formato de vivienda, por lo que el mercado debe entender estas diferencias. Asimismo, explicó que los gobiernos centrales, estatales y locales deben tomar acciones ante la necesidad de reserva de suelo y que no quede solamente en los propietarios.
Por su parte, Mariana Flores García, arquitecta e investigadora en Gerontología Ambiental, Vivienda y Ciudad, destacó que la oferta del mercado atiende a un nicho en específico, que no es necesariamente la mayoría de la población. Así, consideró que se requiere de mecanismos para dar acceso a la vivienda, así como adaptar los espacios hacia nuevas formas de habitabilidad y convivencia.
Papel del municipio en políticas de vivienda
Acerca de la intervención de los municipios y alcaldías en el desarrollo de nuevas viviendas de bajo costo, Kunz Bolaños enfatizó que los municipios pueden trabajar en cuatro líneas para satisfacer esta necesidad: 1. La planeación, en la cual pueden no usar necesidades y hacer viviendas más grandes que los pongan en competencia para comprar el suelo. 2. Fijar las diferencias de zonas habitacionales por tipo de vivienda y no por necesidades. 3. Los municipios deberían enfocarse más en la gestión del desarrollo urbano. 4. Implementar instrumentos de gestión de la valorización, mediante los cuales, los municipios puedan tener recursos para poder hacer estas intervenciones.
Ante esto, Gabriela Quiroga, titular de El Colegio de Urbanistas de México, explicó que los municipios no tienen ni la capacidad ni los recursos para hacer estas intervenciones. Así, lo primero que deberían hacer es conocerse, hacer un inventario de cómo está la vivienda a nivel municipal y determinar dónde sí y dónde no puede haber vivienda. Así como también, generar programas de desarrollo urbano municipales que entiendan que la cuestión no es solo de vivienda, pues tiene que existir también la posibilidad de fuentes de empleo y de servicios.
Finalmente, los especialistas destacaron que se requieren de adecuaciones legislativas a nivel estatal, en las que los municipios puedan tener mayores facultades para poder actuar, así como promover nuevos esquemas de planeación de vivienda, que contemplen las nuevas circunstancias y necesidades.
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