Durante veinte años, Bicitekas ha roto paradigmas sobre el uso de la bicicleta en entornos urbanos; celebran con muestra de cine y movilidad
El principal reto de movilidad para el país en la actualidad es la integración del transporte; además de promover el uso de la bicicleta y desincentivar el uso del automóvil, la prioridad debe ser mejorar el transporte público, señala Agustín Martínez Monterrubio, presidente de la asociación civil Bicitekas.
En entrevista para Centro Urbano, el activista y diseñador gráfico también se define como un gozador de la vida y un motivador. La asociación que dirige celebra veinte años de creación en 2018; en ese tiempo, los Bicitekas se han distinguido por romper paradigmas de movilidad, sociedad y desarrollo urbano.
“Cuando estudiaba la universidad y me movía en bicicleta eso era visto como algo de gente pobre”, rememora mientras habla de la historia del proyecto. Relata los obstáculos que enfrentó al poner sobre la mesa asuntos de medio ambiente, cultura vial y ciclismo. “Cuando armé el Día de la Tierra en la escuela, los directivos desconfiaban de mi, cuando yo solo quería revalorar la ecología”, expresa.
Agustín Martínez conoció a los Bicitekas ya conformados y organizados por el periodista belga Tom Dieusaert. Durante su estadía en la Procuraduría Social del gobierno de Cuauhtémoc Cárdenas, en 1997, tuvo contacto con el grupo de activistas que ya habían echado a andar el primer paseo sobre ruedas en la capital.
Después de que los medios cubrieran su proyecto de instalar el primer circuito de ciclovía en la zona Roma-Condesa, Jorge Legorreta, delegado de Cuauhtémoc en ese momento, prestó su apoyo a la propuesta. Tras meses de juntas y organización vecinal, el primer paseo nocturno en bicicleta se echó a andar en el Ángel de la Independencia.
A través de Yahoo Groups los participantes discutían y aportaban ideas. Martínez Monterrubio recuerda esta etapa como un “laboratorio social” con un fuerte componente de la filosofía zapatista. A partir de una invitación enviada por un grupo de Canadá, celebraron el ‘Car Free’ o Día Mundial Sin Auto el 22 de septiembre –que hasta este año se oficializó en nuestro país.
En ese momento surgió ‘Velo. Revista del ciclista urbano’; “Tom y yo la hacíamos, la vendíamos y la repartíamos: hacíamos todo. A pesar de que existía mucho ciclismo deportivo, en ese momento la idea del ciclismo urbano era una locura”, recuerda.
Bicitekas reconoce ser un movimiento heredero y contemporáneo de otras experiencias. En sus inicios, Agustín Martínez investigó y contactó con los integrantes del Movimiento Bicicletero de finales de los años ochenta e inicios de los noventa. Al retomar un proyecto de los pioneros, conocieron a los ciclistas de Cuernavaca, entre quienes estaba Areli Carreón, ex presidente de la asociación y actual Alcaldesa de la Bicicleta de la CDMX.
Los activistas resaltan por la creación y apoyo de diversas iniciativas en los últimos veinte años. En 2008, con motivo del décimo aniversario, Agustín, Areli y un conjunto de activistas convocaron al Primer Congreso Nacional de Ciclismo Urbano; de este esfuerzo derivó BiciRED – Red Nacional de Ciclismo Urbano.
También Bicitekas impulsó la campaña ‘Hazla de tos por aire limpio’, que buscaba endurecer las restricciones de contaminantes mediante carteles informativos, cortos y canciones. “Antes la percepción de riesgo era muy laxa; no habían contingencias por las cantidades establecidas en la norma”, explica Martínez.
El ‘Manual del Ciclista Urbano’ vio la luz en 2011 como producto de la colaboración entre la asociación y el gobierno de la Ciudad de México. Resalta que el proceso de creación fue “tortuoso, pero el resultado fue muy bueno; el gobierno puso los recursos y nosotros la pasión, el interés y los estudios”. Además de ese proyecto, los activistas pudieron echar a andar la Casa Biciteka y diversos estudios en conjunto con ITDP.
A pesar de trabajar con diversos gobiernos, Martínez Monterrubio señala los conflictos que generan los periodos electorales para organizaciones de la sociedad civil. “A veces quieren cobrar en tiempo de campañas el apoyo que dan como autoridad. No entienden que nuestro objetivo no es ese. Es una satisfacción ser libres; nadie nos quita ser críticos; llegue quien llegue, nosotros vamos a seguir aquí”, enfatiza.
Como muestra del compromiso que mantiene con la causa de la movilidad, el colectivo forma parte desde 2015 de la plataforma #YoMeMuevo, con la cual distintas organizaciones impulsan una agenda en la materia. Con esta iniciativa, invitan a candidatos a cargos de elección popular a comprometerse a desincentivar el uso del coche, apoyar el transporte público, en bicicleta y peatonal, y asignar recursos.
La carencia de continuidad con los compromisos resalta también como un serio reto para la movilidad. “Seguimos viendo políticas públicas erráticas. Hay buenas voluntades e intenciones, pero a veces parece una mera cuestión electoral y de percepción”, denuncia.
Tras la celebración en México del Sexto Foro Mundial de la Bicicleta (FMB6) en abril de 2017, la iniciativa de para crear una exhibición fílmica sobre el tema cobró forma. Con la colaboración de instancias como Procine y en el marco de los 20 años de Bicitekas, se celebrará la segunda edición de la Muestra Internacional Cine y Movilidad.
En homenaje a los primeros pasos del movimiento la Muestra será clausurada el día 22 de septiembre en la Cineteca Nacional. “En el festival no buscamos producciones profesionales, sino grandes ideas”, abunda.
Entre los nuevos proyectos que el movimiento Biciteka impulsa actualmente destaca la intención de que el encuentro de Alcaldías de la Bicicleta a nivel mundial se realice en la Ciudad de México. También el acto cultural y político ‘Yo quiero un presidente’, a celebrarse el 30 de junio en el Hemiciclo a Juárez. “Seguimos evolucionando con la filosofía de compartir conocimiento”, concluyó.
