De acuerdo con un análisis del organismo, el comercio minorista y los servicios turísticos, como restaurantes, tiendas locales, guías y experiencias culturales, son de los más beneficiados por la operación de servicios de renta como Airbnb
El turismo digital se ha convertido en un motor clave para la economía local de la capital, con plataformas como Airbnb generando un impacto significativo en comunidades y negocios barriales, de acuerdo con Philippe Boulanger, vicepresidente de Economía Digital de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (CONCANACO).
Un estudio de hospedaje elaborado por la organización revela que por cada peso gastado en Airbnb, se generan cuatro pesos adicionales en transporte, gastronomía y comercio local, lo que se traduce en una derrama económica directa para micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES).
“Este efecto dinamiza sectores como el transporte, la gastronomía y el comercio minorista, generando mayores ingresos, promoviendo la creación de empleo y fortaleciendo la economía local, especialmente en las comunidades aledañas a los alojamientos”, señaló Boulanger.
Sectores más beneficiados
Según el informe, los principales beneficiados son el comercio minorista y los servicios turísticos, como restaurantes, tiendas locales, guías y experiencias culturales. Además, el 36% de las MIPYMES en la Ciudad de México han visto incrementada su facturación gracias al turismo a través de plataformas digitales, con un impacto especialmente positivo en negocios liderados por mujeres.
De hecho, más de la mitad de las empresas encabezadas por mujeres registraron crecimientos superiores al 11%. Para Boulanger, la inclusión femenina es “un pilar clave en la transformación digital del turismo”, ya que las emprendedoras han mostrado gran capacidad para adoptar nuevas tecnologías y acceder a mercados globales.
Retos y oportunidades
El vicepresidente de CONCANACO destacó que el futuro del turismo digital en México depende de avanzar en la digitalización de las MIPYMES, fortalecer la capacitación en estrategias basadas en datos y establecer un marco regulatorio equilibrado que permita la coexistencia con el sector hotelero tradicional.
“La colaboración entre gobierno, iniciativa privada y plataformas como Airbnb es esencial para formalizar la economía del turismo digital. Este esfuerzo conjunto permite establecer reglas claras que impulsan la competitividad, fomentan el emprendimiento y aseguran un impacto positivo en las economías locales”, subrayó.
Perspectivas a cinco años
De cara al futuro, Boulanger prevé que en los próximos cinco años el turismo digital genere un impacto económico aún más relevante, respaldado por la digitalización y programas como La Gran Escapada. Asimismo, identificó una oportunidad clave para plataformas como Airbnb: fortalecer alianzas con negocios locales, impulsar prácticas sostenibles y abrir más oportunidades a mujeres y comunidades indígenas.
“El gran desafío para México será establecer un marco regulatorio que fomente la digitalización y la competencia, al tiempo que sea favorable para las MIPYMES. Solo así podremos consolidar al país como un destino competitivo en el mercado global del turismo digital”, concluyó.
