Al dominar los conceptos básicos acerca de una inversión inmobiliaria, el capitalista podrá evaluar y gestionar sus movimientos
Para comenzar con alguna inversión inmobiliaria, el capitalista debe conocer el mercado; para empezar debe saber tres conceptos básicos al respecto, de esta forma, tendrá una base sólida de conocimientos.
Es importante que el inversionista conozca los próximos términos, de manera que podrá evaluar y gestionar sus movimientos; así como profundizar en otros aspectos relacionados, como el análisis del mercado, entre otras cosas. Al respecto, Rodrigo Sánchez-Ríos, cofundador de La Haus, proptech, indicó que de esta forma, la persona tendrá más confianza en realizar tratos.
“Se recomienda iniciar por algo pequeño para irse familiarizando con los conceptos, se trata de tener paciencia para entender todos los mecanismos y con el tiempo se adquiera conocimiento y mayor confianza. Cuando uno incursiona en la inversión inmobiliaria genera valor cada día, cada mes, cada año, es decir, se incrementa tu capacidad, aumenta el cupo de apalancamiento, el ingreso que recibes y te permite crecer e invertir cada vez más”, comentó
Términos básicos en una inversión inmobiliaria
Durante el webinar ‘Inversión en bienes raíces para principiantes’ de La Haus, especialistas señalaron los siguientes conceptos básicos.
Flujo de caja
Este término se refiere a la cantidad de dinero que ingresa y egresa a partir de una inversión en bienes raíces durante un periodo determinado. Este es calculado al restar los gastos que implica el mantenimiento de una propiedad como impuestos o hipotecas; de manera que, cuando este flujo de caja es positivo indica que la inversión está generando beneficios.
Para llevar el control de ello, los expertos indicaron que el inversionista puede plasmar los movimientos obtenidos para así realizar un balance de todos ellos. Es común que al inicio de la inversión el balance sea negativo, esto se debe a los gastos iniciales que genera la propiedad.
Valorización
La valorización es el incremento en el valor comercial y catastral del inmueble a lo largo del tiempo, estos costos pueden cambiar por la demanda del mercado, mejoras en la propiedad, desarrollo de la zona, cambios en la economía, construcción de obras públicas, por mencionar algunos.
En cuanto a los dos tipos de valores, el valor catastral es el dictamen emitido por el catastro del municipio o de la entidad federativa para determinar el costo de una propiedad. En este caso, los encargados de calcularlo son los colegios de valuadores y notarios públicos certificados por la Sociedad Hipotecaria Federal.
Mientras que el valor comercial se determina partiendo del avalúo y considerando el precio de la propiedad en el mercado inmobiliario; así como las características del inmueble, la ubicación, la economía nacional, los años de construcción, entre otras.
Rentabilidad
Finalmente, la rentabilidad indica si la inversión inmobiliaria es un trato seguro, ya que evalúa la utilidad de la misma. En este caso existe la rentabilidad bruta y la rentabilidad neta.
