Se redujo la circulación vehicular a dos carriles y se instaló mobiliario urbano para el disfrute del peatón
A través de adecuaciones balizadas sobre el asfalto y la reducción de tres carriles a una de las avenidas más importantes del Centro Histórico de la ciudad de México, la Avenida 20 de Noviembre forma parte de un programa piloto para integrar y dar mayor importancia al transeúnte.
El proyecto que lleva por nombre MiCalle, contempla la creación de islas peatonales y permitir zonas de descanso para una circulación cómoda y segura para el peatón, según informó la Autoridad del Espacio Público (AEP), órgano desconcentrado de la Secretaría de Desarrollo Urbano.
Se mantendrán dos carriles de circulación vehicular, con bahías de ascenso y descenso para regular el transporte público y privado. Incluye la implementación de una ciclovía. Se ganaron 2 mil 730 metros cuadrados mediante la coloración del asfalto de las zonas peatonales, en las que se colocó mobiliario urbano, como macetas y vegetación que contribuye a una mejor convivencia y disfrute del corredor vial.
En la planeación del proyecto participaron especialistas de Bloomberg Associates, responsable de la transformación de calles en la ciudad de Nueva York, y se espera que con este tipo de intervenciones se cree un vínculo entre la ciudad y sus habitantes al redistribuir el espacio público para la circulación ordenada de peatones, ciclistas y automóviles. Se espera que el programa sea bien aceptado y se convierta en algo permanente.