El arquitecto alemán Hermann Tilke se encargó de los cambios en el diseño de la pista
Este fin de semana fue reinaugurado el Autódromo Hermanos Rodríguez de la Ciudad de México, cuya remodelación estuvo a cargo de 19 empresas mexicanas, así como del arquitecto alemán Hermann Tilke, quien se encargó de los cambios en el diseño de la pista.
Tilke es el arquitecto de la categoría reina y ha sido responsable del diseño de todos los circuitos de última generación, entre los cuales destacan los de Malasia, China, Baréin, Rusia o Abu Dabi.
La renovación del autódromo incluyó un nuevo edificio de pits, una torre de control, un centro de medios, zona médica, tres puentes peatonales, remodelación y construcción de nuevas gradas, además de la instalación de una nueva carpeta asfáltica que fue modificada con polímeros.
La pista del Autódromo ahora mide en total 4,305 metros, tiene siete curvas a la izquierda y 10 a la derecha, con una recta de 1,314 metros que lleva a los monoplaza a que alcancen velocidades de hasta 328 km/h, lo que la convierte en la segunda más rápida después de Monza.
El recinto cuenta también con una nueva enfermería con equipo de ultima generación, una torre de control donde se monitorea la carrera, un media center con capacidad para 500 periodistas de todo el mundo, un pit building con 33 boxes para recibir a las escuderías, ampliación de gradas y una nueva Grada Plata con lo que la capacidad del AHR abarcará a alrededor de 110,000 aficionados.
Además, para llevar a cabo su construcción más de 1,000 trabajadores mexicanos colaboraron cubriendo jornadas de ocho horas de trabajo al día, y se utilizaron más de 18,000 m3 de asfalto, hecho con elementos locales como obsidiana, arena y grava.