La torre de 57 pisos se encuentra al 90 % de su construcción, quedará finalizada en diciembre de 2015
La Torre Reforma colocó su última viga, la cual fue pintada de blanco y firmada por cada uno de los trabajadores que participaron en su construcción, con lo que la construcción alcanzó los 246 metros de altura y 57 niveles de su diseño y ofrecerá 45 mil metros cuadrados de espacios rentables para oficinas a partir de diciembre de 2015, cuando finalicen las obras.
De acuerdo con un comunicado emitido por Torre Reforma, ya se registra un avance de 90 %, y ofrecerá espacios divididos en 14 conjuntos de tres pisos de dos mil 300 metros cuadrados cada uno y más de dos mil 500 metros cuadrados de áreas comerciales.
Este edificio contará con aire limpio en el interior, iluminación y ventilación natural, así como vista al Bosque y Castillo de Chapultepec, factores que propiciarán un aumento de hasta 18 % en la productividad y que contribuyen a reducir el estrés de acuerdo al Consejo para Edificios Verdes de Estados Unidos. Además, este es uno de los primeros rascacielos en contar con Certificación LEED Platino por su alta sustentabilidad.
Una vez en operación, Torre Reforma contribuirá con el ahorro de 25 % en consumo energético y 30 % en consumo de agua potable, con lo que se ahorrarán alrededor de 13 millones 600 mil litros de agua al año, evitando el consumo de energía por su traslado y bombeo; además de dejar de producir 700 toneladas de bióxido de carbono al año, gracias al uso eficiente de la energía; así como en el tratamiento al ciento por ciento de las aguas residuales.
La última viga de la torre, será posteriormente izada con la bandera mexicana, y el diseño de la torre, a cargo del arquitecto Benjamín Romano, mantendrá el patrimonio artístico de la ciudad y la modernidad de su concepto.
