La diputada Lilia Aguilar Gil propuso reformar la Ley General de Asentamientos Humanos, que incluirá el concepto de especulación inmobiliaria
La Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) señaló que el alto costo de la vivienda y la percepción de bajos ingresos genera en México; la incapacidad de adquisición de vivienda a través de financiamientos. Por tal motivo, se necesitan acciones legislativas que combatan y erradiquen la especulación inmobiliaria.
En ese sentido, la diputada Lilia Aguilar Gil (PT) declaró que los costos de los inmuebles se elevaron de manera alarmante en los últimos años. Esto debido a que la especulación inmobiliaria, es el principal impedimento para que la población compre un bien inmueble.
Debido a ello, la también presidenta de la Comisión de Vivienda propuso reformar la Ley General de Asentamientos Humanos. Con lo cual se incluirá el concepto de especulación inmobiliaria, cuyo propósito constituirá un andamiaje legal que combatirá dicho fenómeno.
En consecuencia, se podrían generar ciudades más ordenadas, diversas y con una menor cantidad de predios en desuso e incluso invadidos. Lo que daría como resultado el uso óptimo del suelo.
Especulación inmobiliaria, un problema para la vivienda
Ante el rápido crecimiento de las ciudades, la diputada Lilia Aguilar Gil destacó que es indispensable que este fenómeno sea llevado de la mano por principios lógicos de proximidad. Además de la preservación del suelo y su uso, así como el trabajo por una ciudad más diversas y heterogénea que disminuya el desplazamiento, con lo cual se propiciará la cohesión social.
Sin embargo, en la actualidad, el acceso a una vivienda digna es una meta difícil de alcanzar. En cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (inegi) de las 5.8 millones de viviendas rentadas. El 52.4% son alquiladas debido a que sus habitantes no logran acceder a créditos o no cuentan con los recursos suficientes.
A la par, el 9.7% de los inquilino aseguran que es más accesible pagar una mensualidad en renta que una hipoteca. Esto se debe a que los ingresos familiares no son suficientes para acceder a la compra de un bien inmueble.
Ya que, el 69.10% de los hogares percibe menos de cinco veces el valor de la Unidad de Medida y Actualización (UMA) mensual vigente.
