La remodelación incorpora un impactante pabellón de cristal en la azotea para un próximo restaurante y bar
Un hito emblemático de Hong Kong abrió sus puertas a principios de este año como un lujoso hotel de 336 habitaciones, luego de una extensa transformación llevada a cabo por la firma de arquitectura Foster+Partners.
Se trata del ‘Murray Building‘, proyecto que conservó la arquitectura modernista original del edificio, que data de la década de 1960, para reencarnar en un hotel que trae una nueva interpretación de lujo con una estética minimalista y acabados artesanales.
Este complejo cuenta con las mismas ventanas empotradas de antiguo edificio para ofrecer vistas panorámicas a ‘The Peak’, así como hermosas vistas a los jardines del sur y del puerto norte.
Además, el ‘Murray Building’ conserva los grandes arcos de nivel de entrada, mientras que las nuevas incorporaciones incluyen un impactante pabellón de cristal en la azotea para un próximo restaurante y bar.
Todas las habitaciones del hotel son notables por su amplitud, ya que 75% tiene más de 50 metros cuadrados, y se encuentran distribuidas en 25 plantas, muchas de ellas vistas panorámicas.
La importante transformación del edificio apunta a reinventar este barrio urbano abandonado, a través de la unión del tejido urbano con los grandes espacios verdes que flanquean el sitio al este y al oeste.
La arquitectura del edificio original responde directamente al clima de Hong Kong, ya que las ventanas empotradas cuidadosamente están orientadas para evitar la áspera luz del sol tropical, con lo que obtuvo el premio ‘Energy Efficient Building Award en 1994’.
El diseño conserva la fachada al tiempo que mejora otros aspectos de la construcción y extender la vida del edificio mediante la introducción de una nueva función apropiada para las demandas cambiantes de la ciudad, lo que le da un legado sostenible para los próximos años.
