El proyecto del Tren Maya, además de la infraestructura en sí, busca crear condiciones para fomentar un desarrollo sostenible en la región sureste del país: Jiménez Pons
El Tren Maya, una de las obras insignia de la actual administración federal, ha presentado diversas opiniones en torno a su construcción y a su devenir. Para las autoridades, este es el proyecto clave para impulsar sostenida y sosteniblemente el desarrollo económico, social y ambiental de la región por la que pasará: el sureste de México.
En entrevista para Centro Urbano, el titular del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons, detalló que el proyecto ferroviario del Tren Maya va más allá de la construcción de infraestructura, se trata de un proyecto integral de desarrollo para el sureste del país.
Así avanza el proyecto
Rogelio Jiménez hizo un balance sobre los avances que se tienen en la construcción de la magna obra. En ese sentido, recordó que este año se han licitado 4 de los 7 tramos en los que se planea trabajar los 1,500 kilómetros de extensión que tendrá.
Queda pendiente el tramo 5, luego de la declaratoria de licitación desierta y los últimos dos tramos que correrán a cargo del Ejército mexicano e iniciarán labores en 2021.
Las acciones esenciales, hasta el momento, son de recuperación de la funcionalidad de la vía. Jiménez Pons describió que se encuentran trabajando en la revitalización de 700 km de vía ya existente y en condiciones de gran deterioro.
“Los 700 km del tramo existentes que van de Palenque hasta Valladolid […] tenemos un reguero de instalaciones sucias que hay que arreglar, hay que limpiar, hay que levantar”.
Impactos ecológicos del Tren Maya
El titular de Fonatur hizo hincapié en que desde su dependencia se busca trabajar responsablemente en la construcción del Tren Maya y dejar el mínimo impacto ambiental, que toda obra trae intrínsecamente.
Destacó de sobremanera el hecho de que no solo se busca detener el impacto ecológico sino que, ambiciosamente, puntualizó, se busca dejar al doble el área de reserva ecológica en Calakmul.
“Se genera un programa de rehabilitación, más aparte un programa físico de ordenamiento; estamos tratando de que se alcance, esperamos que al final del sexenio podamos duplicar la reserva la Biosfera, que lo más importante”.
Sobre manifestaciones de impacto ambiental
Uno de los puntos sobre la mesa, que más ha causado revuelo en el debate público ha sido el hecho de que Fonatur inició obras sin Manifestaciones de Impacto Ambiental (MIA).
Rogelio Jiménez indicó que esto se debe a que los trabajos realizados hasta este momento han sido en entornos que ya han sido impactadas previamente. Ya hay una carretera, vías oxidadas del antiguo tren o cableado eléctrico, ejemplificó.
“El trabajo que está realizando se en este momento, y que es el 90%, lo que vamos a hacer tiene que ver con zonas ya impactadas previamente […] es donde pasa actualmente el tren que son 700 kilómetros prácticamente la mitad de los 1,500 […] y ya existen zonas que tienen décadas impactadas […]
“No son zonas prístinas intocables; hoy hay una carretera o ya hay un cable de luz o ya hay una línea de ferrocarril entonces tampoco estamos entrando a las zonas así, prístinas”.
Tren Maya y la infraestructura para impulsar el desarrollo
En ese contexto, el funcionario recordó que una de las razones por las que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) no realizó el proyecto es porque Fonatur esta designado jurídicamente a realizar proyectos turísticos integrales, que van más allá de la pura obra civil.
“Fonatur es un instrumento del estado mexicano con una estructura relativamente pequeña en comparación de las grandes secretarias de estado, pero siempre se queda proyectos integrales, es decir, más allá de ver solamente infraestructura, [atiende aspectos] operativos, financieros, culturales, tienen un mandato más abierto”.
Jiménez Pons refirió un estudio hecho por ONU-Hábitat en el que se encontró que las acciones de infraestructura y construcción de conectividad transformaron positivamente a las ciudades; en México ese es el objetivo principal con la construcción del Tren en la región maya.
La riqueza del sureste
El titular del Fondo describió a la región sureste del país como una de las más ricas en términos de recursos naturales. En ese contexto, indicó que el Tren es un proyecto muy viable para impulsar el desarrollo en dicha región.
“La gran ventaja es que todo esto es muy viable porque es muy rentable, al país le conviene invertir en el sureste porque la región más rica en términos de recursos”.
En esta región, continuó el directivo, se extraen los recursos naturales fundamentales para el desenvolvimiento industrial de otras zonas y de todo el país, además, posee recursos que en otros lugares escasean bastante, como es el caso del agua.
“Se saca la energía, el petróleo, el gas, la electricidad; de las presas se sacan y aparte es una región que hay agua, misma que escasea muchísimo en el resto del país”.