Desde la primera vez que escuché hablar acerca de los productos orgánicos empecé a interesarme sobre este tema y todo lo que su consumo implicaba, es decir, los beneficios que podía traerle a mi salud.
Cuando supe que la mayor parte de la comida que consumimos contiene pesticidas tóxicos, fertilizantes químicos u organismos genéticamente modificados, me di a la tarea de comenzar a cambiar mi estilo de vida tratando de consumir, en lo posible, alimentos orgánicos.
Una de las principales características de estos productos es que los ingredientes utilizados para su elaboración no han tenido contacto con químicos o procesos de ionización, ni son artificiales.
Consumir orgánicos puede resultar más caro, sin embargo, es de suma importancia que las personas conozcan que un cambio como este en su estilo de vida, puede ayudarles a reducir las posibilidades de desarrollar enfermedades, fortalecer su sistema inmunológico, mejorar la calidad del sueño, además que puede promover la pérdida de peso.
Para las personas que aún tienen duda sobre si deben o no consumir alimentos orgánicos, deben considerar que dentro de las ventajas que podemos encontrar en estos productos destaca el que éstos no contienen aditivos, pesticidas, antibióticos u organismos genéticamente modificados; además, respetan el bienestar animal, protegen al medio ambiente, son más sabrosos y sus niveles de calidad son mucho más altos.