De enero a mayo de 2025 se registraron 12,357 carpetas de investigación por el delito de despojo de vivienda en el país
La invasión de propiedades privadas y el despojo de vivienda se han convertido en un problema creciente en México, con miles de denuncias al año y consecuencias legales y sociales cada vez más visibles.
Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de enero a mayo de 2025 se registraron 12,357 carpetas de investigación por el delito de despojo de vivienda en el país, un repunte respecto a los 12,313 del mismo periodo en 2024, y principalmente en el Estado de México, Ciudad de México y Guanajuato.
En el caso del Edomex, entre 2020 y 2024 se presentaron 24,915 denuncias (4,559 en 2020; 4,936 en 2024), con un aumento del 7% en el primer bimestre de 2025, cuando se registraron 861 denuncias frente a 804 en el mismo periodo de 2024
Por su parte, en la CDMX se denunciaron 1,559 casos entre enero y mayo de 2025. Las alcaldías Iztapalapa, Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero concentran el 35.7% del total.
Además, a nivel nacional existen más de 6 millones de viviendas deshabitadas en el país, que representan casi el 14 % del total de casas particulares, y se estima que el 25% podrían estar invadidas o en posesión de terceros sin que los propietarios lo noten.
Estas cifras evidencian que la invasión de vivienda ha crecido en los últimos años, en particular en inmuebles deshabitados o terrenos baldíos. Y, en muchos casos, los propietarios desconocen el proceso legal para recuperar su vivienda y optan por confrontar directamente a los ocupantes, lo que puede derivar en incidentes violentos y problemas legales adicionales.
¿Qué hacer si mi vivienda está invadida?
- Evitar la confrontación directa
Los expertos aconsejan no intentar desalojar a los invasores por cuenta propia. Cualquier acción de este tipo puede representar un riesgo físico y, en algunos casos, puede interpretarse como un acto ilícito por parte del propietario.
Lo recomendable es recabar toda la documentación que acredite la propiedad del inmueble, como escrituras, contratos de compraventa, boletas prediales, recibos de servicios y testimonios de vecinos. Además, es útil recopilar fotografías o videos que demuestren que el inmueble estaba ocupado de manera ilegal.
- Denuncia formal ante la autoridad
Una vez reunidas las pruebas, el siguiente paso es presentar una denuncia formal ante el Ministerio Público por el delito de despojo o invasión de propiedad privada.
El Código Penal Federal, en su Artículo 395, establece sanciones de tres a cinco años de prisión y multas económicas para quienes ocupen un inmueble sin autorización del propietario. En caso de que la invasión se haya realizado con violencia o por parte de grupos organizados, la pena puede aumentar.
- Asesoría jurídica: clave para recuperar el inmueble
Tras levantar la denuncia, se recomienda contratar a un abogado con experiencia en derecho civil e inmobiliario. El especialista evaluará si el caso debe resolverse mediante la vía penal o la vía civil, en la que se recurre a un juicio reivindicatorio para recuperar la posesión legítima.
Si los invasores llevan varios años en la vivienda y alegan posesión pacífica, podría incluso aplicarse la figura de prescripción adquisitiva, lo que hace indispensable una estrategia jurídica adecuada.
- Prevención: la mejor defensa
Más allá de los procesos legales, los expertos coinciden en que la prevención es la mejor herramienta para evitar la invasión de viviendas. Entre las medidas más efectivas están mantener el inmueble habitado o con vigilancia periódica, instalar sistemas de seguridad como cámaras o alarmas, y mantener al corriente el pago de impuestos y servicios.
Asimismo, es importante contar con las escrituras debidamente registradas y verificar regularmente el estado legal del inmueble en el Registro Público de la Propiedad.









