De acuerdo con la Sedatu, el Programa busca que los municipios de la región puedan actualizar sus programas de desarrollo urbano
El pasado domingo 4 de junio se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) la versión ejecutiva del Programa de Ordenamiento Territorial de la Región Sur-Sureste (POT-RSSE); instrumento de planeación elaborado por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
La región está integrada por 271 municipios y más de 6,500 localidades en los estados de Campeche, Chiapas, Tabasco, Quintana Roo y Yucatán. Los cuales concentran una población de más de 13 millones de personas, 70% de las cuales habita en zonas urbanas.
Asimismo, cuenta con 46 Áreas Naturales Protegidas, 66 zonas arqueológicas, 8,200 inmuebles históricos y seis sitios declarados Patrimonio de la Humanidad.
No obstante, el sur-sureste tiene grandes retos, como disminuir las desigualdades, la marginación y pobreza en la que vive más del 55% de su población. Además de contener la pérdida de bosques, selvas y humedales, detener la sobreexplotación y contaminación de los acuíferos y contener la expansión urbana.
En ese sentido el Programa se elaboró con una visión a 20 años, a través de la definición de políticas de ocupación del territorio como la conservación y protección de zonas de alto valor ambiental, paisajístico y cultural; el aprovechamiento sustentable en zonas con potencial productivo, ecoturístico, y agropecuario; y la consolidación y crecimiento controlado de los asentamientos humanos.
Además, el documento plantea objetivos y acciones de corto, mediano y largo plazo para orientar el desarrollo urbano con la llegada del Tren Maya. Y cuenta con estrategias que abarcan aspectos como:
- Manejo integral de cuencas
- Protección de servicios ecosistémicos
- Conservación del patrimonio cultural y biocultural
- Equidad socioespacial
- Vivienda adecuada
- Desarrollo industrial y productivo
- Movilidad
- Gobernanza efectiva
Al respecto, el titular de la Sedatu, Román Meyer Falcón, señaló que el Programa propone un modelo de ordenamiento territorial que orienta el desarrollo y la ocupación sostenible, equilibrada y equitativa del territorio. Por ello, será el eje rector para armonizar los instrumentos de planeación y ordenamiento territorial de escala estatal, metropolitana y municipal.
“Este Programa permite que los municipios de esta región puedan actualizar sus programas de desarrollo urbano. Además, toma en consideración que más de 260,000 hectáreas se han deforestado en miras de un crecimiento población desordenado y este tipo de instrumentos es uno de los elementos más importantes para poder contener dicho problema”, dijo.