Los consumidores muestran su inclinación por marcas y espacios que cubren sus necesidades cotidianas, lo que impulsa un cambio en los centros comerciales
Durante los primeros meses de 2025, los consumidores adoptaron una actitud más cautelosa ante el panorama económico y comercial, enfocando sus gastos en necesidades básicas y dejando de lado las compras excesivas.
En ese sentido, SiiLA reportó que los sectores de productos de consumo, alimentos, entretenimiento y servicios personales concentraron el 98% de las absorciones en los centros comerciales, lo que refleja una preferencia por priorizar los hábitos, los deseos y el ritmo de la vida urbana.
La consultora señaló que el comportamiento de los consumidores indica que el exceso ya no es opción para ellos. Por lo que los espacios comerciales están volviendo a lo básico, priorizando la comodidad, cercanía y experiencia inmediata.
Las marcas más populares hoy pertenecen a rubros cotidianos, experiencias personales o bienes accesibles, lo que confirma que la gente sigue consumiendo, pero busca lo práctico. En consecuencia, los centros comerciales evolucionan y ya no giran en torno al consumo masivo, sino a lo cotidiano.
Segmentos dinámicos en los centros comerciales
SiiLA detalló que, en productos de consumo, casi cuatro de cada 10 metros cuadrados (m²) fueron absorbidos por marcas de autopartes, bienes esenciales, hogar, juguetes, mascotas y ropa.
En el sector de alimentos, la demanda se concentró en cafeterías, restaurantes y tiendas especializadas o de conveniencia, que absorbieron cerca de tres de cada diez m².
El segmento de entretenimiento, que incluye arcades y parques temáticos, concentró menos de dos de cada diez m², mientras que los servicios personales, como gimnasios, operadores de telecomunicaciones, salones de belleza y servicios de salud, ocuparon la menor proporción.
Finalmente, SiiLA destacó que el segmento de lujo no figura entre los más populares, a pesar de proyectar un crecimiento anual sostenido del 7 % hacia 2032. Esto se debe a que su oferta está dirigida a una minoría con alto poder adquisitivo, en contraste con la mayoría de la población, que prefiere marcas y espacios que ofrecen utilidad y cercanía. Por lo que, la consultora indicó que los centros comerciales dejan de ser “templos de gasto para convertirse en nodos de lo cotidiano”.
