En 1992 fuera nombrado Artista de la Ciudad y también abrió el museo que lleva su nombre
Artistas, familiares y amigos despidieron a José Luis Cuevas con un homenaje en el Palacio de Bellas Artes. El artista plástico que perteneció a la llamada Generación de la Ruptura, falleció el lunes a los 83 años de edad, sus cenizas fueron colocadas en la escalinata del inmueble para despedirlo.
En la primera guardia estuvieron la Secretaria de Cultura federal, María Cristina García; su homólogo de la Ciudad de México, Eduardo Vázquez; la titular del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), Lidia Camacho, así como la viuda del pintor, Beatriz del Carmen Bazán y los subsecretarios federales Jorge Gutiérrez y Saúl Juárez Vega.
La segunda guardia la encabezaron las hijas del artista Ximena, Mariana y María José Cuevas.
“Esta casa, la casa de la excelencia artística, tiene capítulos inolvidables para la vida y obra de José Luis Cuevas. Su nombre estará asociado para siempre al arte, a la transformación, a la memoria, a la juventud permanente, a la ruptura y a la búsqueda”, expresó la titular de la Secretaría de Cultura federal.
García Cepeda dijo que José Luis Cuevas vivió como sólo él podía hacerlo: con irreverencia, originalidad y generosidad, por lo que su nombre es sinónimo de libertad creativa, de búsqueda, de vanguardia y desde siempre referencia y acontecimiento, ingenio y hallazgo.
Para Fernando González Gortázar, escultor y arquitecto, el homenaje representa la continuidad de la obra de Cuevas en la cultura del país.
“Su obra es uno de los puntos culminantes del arte mexicano de todos los tiempos, que destruyó para siempre el absurdo de creer que un dibujo o un grabado son intrínsecamente inferiores a un cuadro, a un mural”, aseguró.
El poeta Homero Aridjis enalteció la figura de Cuevas, tanto en lo artístico como en lo público, también dijo que extrañará a su amigo, con quien participó en la organización ambientalista conocida como el Grupo de los Cien.
“Desde el punto de vista estético fue uno de los grandes dibujantes de México, sin olvidar la parte contestataria de su personalidad que se expresa mediante su escultura monumental. Precursor de la transición de México hacia la libertad que logró amasar la rebeldía de una generación”, así lo recordó el político Porfirio Muñoz Ledo.
A la última despedida de Cuevas asistieron el actor Daniel Giménez Cacho; el director de cine Alfonso Arau; la actriz Marisol Gasé, el poeta Homero Aridjis, el escultor y arquitecto Fernando González Gortázar; el político Porfirio Muñoz Ledo y los poetas Víctor Manuel Mendiola y Marco Antonio Campos, entre otros miembros de la comunidad cultural y artística.
Acompañó el homenaje la música de Mozart, Albinoni y Massenet a cargo del Cuarteto Ramos, integrado por músicos de la Sinfónica Nacional, la Filarmónica de la Ciudad y Concertistas de Bellas Artes.
Elpúblico en general también pudo ingresar para ver la urna de madera rodeada de arreglos florales donde permanecerán los restos de quien en 1992 fuera nombrado Artista de la Ciudad por el Gobierno capitalino, ocasión en que el Museo José Luis Cuevas también abrió sus puertas.
