La mayor parte del patrimonio afectado fueron templos, conventos y capillas, así como obras de arquitectura vernácula, bienes con valor artístico, museos y zonas arqueológicas
Completo el chiste antes de que alguien me salte a la yugular por andar diciendo pendejadas; la vivienda social no sube de precio en la Ciudad de México, porque no puede subir de precio algo que no existe.