Las profesionales mexicanas apuestan por una arquitectura sustentable, que favorezca el desarrollo de las comunidades aledañas a las estaciones del Tren Maya
En el marco del Día Internacional de la Mujer, que se conmemora el próximo lunes 8 de marzo, la industria destaca la labor de dos arquitectas mexicanas que colaboran en el desarrollo del Tren Maya.
Se trata de Gabriela Bojalil, con su despacho DAFDdf, y Ana Elena GayAranda, del despacho AE GAYARANDA, quienes han realizado el diseño arquitectónico de las estaciones Palenque y Chichén Itzá; mismas que incluyen un polo de desarrollo para las poblaciones.
Además, los anteproyectos arquitectónicos integrales de ambas estaciones están diseñados, principalmente, para generar un impacto positivo para el medio ambiente y la comunidad. Las propuestas buscan potenciar la zona y generar el progreso que sus habitantes necesitan; con lo que se contribuye al bienestar de México y sus visitantes.
La estación de Palenque es de demanda media y de carácter turístico; y contará con cuatro vías y dos andenes. Ésta será la primera estación de la ruta de 1,500 kilómetros del Tren Maya, y se ubicará en el terreno del antiguo aeropuerto de Palenque, Chiapas.
El concepto arquitectónico retoma la máscara de Pakal y se conforma por un edificio con grandes cubiertas inclinadas, con un porcentaje de techos verdes en dos niveles. Asimismo, tendrá zonas públicas y andadores con locales de servicio, técnicos y comerciales; una plaza y jardines que evocan la selva chiapaneca; y en el sótano se localizará una estación multimodal y áreas de servicios.
En tanto, la estación del tren en Chichén Itzá fungirá como portal de acceso al sitio arqueológico. Fue diseñada con fines sustentables y como un punto de encuentro para convivir, disfrutar y realizar actividades comerciales, culturales y gastronómicas.
La estación contará con una plaza de recibimiento al aire libre, con un corredor gastronómico, un centro de transferencia modal y un corredor turístico y comercial. Además, será de demanda alta y formará parte del tramo 4 del Tren Maya.
Su diseño contiene en sus formas tres elementos esenciales del mundo maya:
- El Arco Maya
- La Ceiba- árbol sagrado para los mayas que representa el centro de la tierra
- La Geometría sagrada de la piel de la serpiente
Adicionalmente, la estructura de la estación representa una serpiente, que evoca la transición de la vida contemporánea hacia el misticismo maya. De manera que el proyecto fusiona la arquitectura, el diseño urbano y de paisaje, conservando el ecosistema y raíces mayas.
Las profesionales mexicanas apuestan por una arquitectura sustentable, que favorezca el desarrollo de las comunidades aledañas a las estaciones del Tren Maya. Ambas resultaron ganadoras de la licitación convocada por Rogelio Jiménez Pons, director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), en 2019.