Carina Arvizu destacó que el Covid-19 ha evidenciado la necesidad de replantear la agenda urbana ambiental integral, en la cual el Estado retome la rectoría del territorio
Sergio Mendoza, director general de Fomento Ambiental, Urbano y Turístico de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), destacó el trabajo que realizan la dependencia, junto con la Secretaría Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), en la generación de la Agenda Urbano-Ambiental, herramienta que permitirá instrumentar acciones que vinculen el desarrollo urbano con temáticas ambientales específicas.
La agenda considera cinco ejes transversales: cambio climático, resiliencia territorial, desarrollo social, desarrollo económico y derechos humanos. Así como siete ejes sustantivos: regulación integral del territorio; biodiversidad y servicios ecosistémicos; calidad ambiental urbana; edificación y vivienda sustentable; infraestructura verde sustentable; movilidad urbana sustentable; y gobernanza urbano ambiental.
En el marco de la penúltima sesión de los Diálogos Ambientales, Mendoza señaló que el país cuenta con distintas áreas de oportunidad en la transición hacia ciudades sustentables. Entre ellas destaca el consolidar una visión de sustentabilidad urbana que considere a la sociedad como un actor activo; redefinir los instrumentos de planeación del territorio con un enfoque integrado, asequible e interinstitucional; proponer modelos de ciudad contextualizados al territorio y a las limitantes ambientales; además de sentar las bases para una agenda interinstitucional para la sustentabilidad en México.
Por su parte, Carina Arvizu, subsecretaria de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Sedatu, afirmó que el Covid-19 ha evidenciado la necesidad de replantear la agenda urbana ambiental integral, en la que el Estado retome la rectoría del territorio.
Agregó que, la planeación urbana no debe atribuirse a la iniciativa privada, ya que por muchos años ésta ha sido la causa de los asentamientos irregulares, en los que la gente vive en zonas de alto riesgo, en viviendas que no garantizan una equilibrada convivencia con la naturaleza y carecen de servicios necesarios.
Finalmente, la subsecretaria subrayó que, dado que cerca del 70% de la población mexicana se concentra en las ciudades, se debe contar con una planeación urbana con visión de responsabilidad ambiental. Así como lograr que las autoridades tomen en cuenta los instrumentos de planeación como un requisito para generar ciudades ordenadas, equitativas y sostenibles, y garantizar una cooperación interinstitucional para alcanzar los objetivos ambientales urbanos planteados en dicha agenda.
