La nueva legislación promueve usos de suelo mixtos, compatibles y densidades sustentables, patrón coherente de redes viables primarias y efectiva movilidad urbana
Este jueves, el pleno del Senado de la República aprobó el dictamen a través del cual se crea la Ley General de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, iniciativa impulsada por el senador panista Francisco Búrquez Valenzuela.
Con 81 votos a favor y 1 abstención, los legisladores dieron el sí a la propuesta que apuesta por la densidad, los usos mixtos y la vivienda. Cabe recordar que en comisiones el dictamen fue aprobado por unanimidad.
En palabras de su principal promotor, la propuesta de Ley busca establecer las bases para un nuevo modelo de desarrollo urbano, incluyente y flexible en aras de proteger el espacio público ante la evolución de las urbes.
Aunado a lo anterior, la iniciativa tiene como meta “promover una adecuada accesibilidad en aras de generar cercanía en las actividades que se desarrollen en las urbes; compatibles y densidades sustentables, patrón coherente de redes viables primarias y efectiva movilidad urbana, que privilegie las calles completas de transporte público peatonal, privado y no motorizado”.
De acuerdo con los senadores la nueva Ley contempla la creación de zonas de salvaguardas, derecho de vía, y polígonos de amortiguamiento industrial, los cuales deberán evitar afectar a terceros.
Asimismo, “en lo que refiere a las zonas de conservación, regulará la mezcla de usos de suelo y sus actividades, mientras que en el resto de las zonas se consideraran compatibles los usos residenciales, los usos comerciales y los centros de trabajo”.
Al presentar la Ley al pleno, el senador Búrquez Valenzuela señaló que el modelo urbano que prevaleció los últimos 40 años es excluyente. Dijo que a pesar que el mundo se había transformado, y reconocido que hay errores en la concepción urbana, en México se mantenía la misma legislación.
“Es una reforma que impacta directamente la calidad de vida; que impacta en los tiempos de traslado, en la economía local y en la inclusión y cohesión social que tanta falta nos hace; que impacta en la productividad y competitiva de nuestros centros urbanos, y en el equilibro ecológico y sustentabilidad de las ciudades. (En síntesis) la llamada reforma urbana es una gran reforma”, dijo.