Muchas veces he escuchado a las personas decirle a sus hijos que estudien para tener un buen trabajo, pero la realidad hoy en día, es que no todo aquél que se gradúe de la Universidad tiene acceso a un empleo
Cuando terminamos una carrera , el mayor anhelo de todos los universitarios es poder encontrar un trabajo de inmediato en donde podamos desarrollar todos los conocimientos adquiridos en la escuela, pero es ahí donde las personas se tienen que enfrentar a las dificultades de conseguir un empleo.
En muchas ocasiones no basta con tener una carrera terminada, ni estar titulado o tener una maestría para tener un buen empleo, ya que lamentablemente es mucha más la demanda que la oferta laboral.
Investigando sobre el tema, encontré un artículo publicado en Erosky Consumer, en el que se dice que los jóvenes que han acabado sus estudios universitarios tienen un futuro profesional un poco desconcertante.
Y es que el problema está en que muchos de los mexicanos que terminan sus estudios no ejercen la profesión o bien terminan buscando un empleo cualquiera, debido a que no hay suficientes fuentes de empleo.
Tan solo en el mes de junio, de los 2.6 millones de desempleados que había en el país, el 38% contaba con estudios de nivel superior, siendo el mayor rango de porcentaje, lo cual confirma que del total de los desempleados, la mayoría son universitarios.
Además, actualmente, hay más de 900,00 personas con ese rango de estudios que están sin empleo, un incremento de 77,883 frente a los datos del cierre del año anterior, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Otro de los grandes problemas que he encontrado es que en muchas ocasiones los jóvenes no logran conseguir un empleo debido a que la mayoría de ellos exige tener amplia experiencia, lo cual, en lo personal, encuentro absurdo, ya que no se puede pedir experiencia de 2 o 3 años a alguien que recién terminó sus estudios.
La falta de empleo en México es uno de sus principales problemas. Los jóvenes que no encuentran trabajo optan por trabajar de lo que sea, con tal de ser autosustentables, lo cual los hace caer en una frustración al sentirse como «fracasados» cuando la realidad es que no tuvieron la oportunidad de demostrar sus habilidades.