Por Laura Barranco*
En marzo de 2020 entró en vigor el Plan Municipal de Desarrollo Urbano de Naucalpan, documento que no había sido actualizado desde 2007. La ausencia de esta obligación contribuyó al agravamiento en la consolidación de asentamientos irregulares que no sólo vulneran a quienes los habitan, sino que abaten el valor ambiental de territorios (cobertura vegetal, biodiversidad y captación de agua).
Además, por sus propias características geológicas, más los fenómenos naturales como sismos o los efectos del Cambio Climático (sequías, lluvias extraordinarias) se convierten en auténticas bombas de tiempo. El caso del Cerro del Chiquihuite en el municipio vecino, Tlalnepantla, es una muestra de ello.
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PLANEACIÓN VS DESORDEN
Un Plan de Desarrollo Urbano Municipal es de suma importancia pues cruza transversalmente obligaciones de Estado en materia urbana, ambiental, de protección civil, de seguridad ciudadana y de bienestar social, por mencionar las más importantes. Se trata de un documento vivo que ciudadanos y autoridades están obligados a respetarlo y a impulsar sus modificaciones mediante mecanismos democráticos establecidos por ley.
En el Artículo 5.20 del Código Administrativo del Estado de México se establecen las reglas para “la elaboración, aprobación, publicación y registro de los planes de desarrollo urbano o de sus modificaciones”. Tratar de recomponer el desorden generado en las últimas 4 décadas en materia de asentamientos irregulares y la omisión de autoridades para evitarlos se plantea como un reto casi imposible, no obstante la seguridad de miles de personas lo amerita.
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DEL BOOM ECONÓMICO AL EMPOBRECIMIENTO
Naucalpan se vislumbraba en las décadas de los 60 y 70 del siglo pasado como un ejemplo en planeación urbana y con una actividad industrial vigorosa. Durante varios años superó índices de crecimiento de varios estados de la República completos. Hoy en cambio se caracteriza por sus asentamientos irregulares, precarios y desiguales.
De acuerdo con el diagnóstico hecho en el propio Plan de Desarrollo Urbano «Los datos agregados de crecimiento del municipio indican una aparente estabilidad demográfica, pero (…) la estabilidad es producto de la declinación y el envejecimiento de zonas formales y el crecimiento de las informales (…) Dicho de otra manera, se está presentando un proceso de empobrecimiento del municipio.»
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¿QUÉ HACER ANTE ESTE PANORAMA?
De entrada lo primero es frenar lo irregular, que no se sigan estableciendo asentamientos en lugares inadecuados y PELIGROSOS. Y en el caso de los fraccionamientos, ante su proceso de despoblamiento y conversión de casas habitación en establecimientos mercantiles (consultorios, salones de belleza, restaurantes, escuelas, etc) sin uso de suelo autorizado es mejor hacerlo de forma ordenada y planeada.
El PMDU propone que “Para los asentamientos irregulares en zonas vulnerables se promoverán programas de reubicación y para aquellos que se encuentran bien ubicados y cuya incorporación a la ciudad formal sea libre de riesgos se plantearán programas de regularización con los órdenes de gobierno facultados para este tipo de acciones siempre con una visión que evite el círculo vicioso de ocupación irregular – regularización – ocupación irregular”.
En línea con la Nueva Agenda Urbana de ONU Hábitat y las legislaciones y planes en la materia a nivel federal y estatal, el Plan de Desarrollo Urbano de Naucalpan promueve la mixtura en los usos de suelo. Campañas plagadas de notas y rumores falsos desvirtuaron los beneficios de esta política que se promueve a nivel mundial. Es importante entender que los usos exclusivos ya no son sostenibles.
INFODEMIA Y MALAS DECISIONES
En el emblemático fraccionamiento de Ciudad Satélite, el proyecto del PMDU sometido a consulta proponía hasta 3 viviendas en lotes de 500 m2, y en lo relativo a los giros condicionados que podían establecerse para fomentar los usos mixtos, estaban: minisúper, cajero automático, servicios veterinarios para mascotas, clubes deportivos, restaurantes, salones de belleza, lavanderías. Todos ya existen, la idea era regularizarlos, ordenarlos.
Pero la infodemia hizo de las suyas, la mayoría de la gente que habita ahí se opuso a todo de manera irreflexiva. Hasta la fecha, dan por hecho que el PMDU aprobó cosas inexistentes. Es tal el grado de desinformación e incomprensión que hay mantas en casas que usan su garage como improvisadas fondas, zapaterías o boutiques.
«Todos los giros que no se encuentren permitidos o condicionados ESTÁN PROHIBIDOS» reza el PMDU. Es importante que los naucalpenses aprendamos a transformar la crisis actual en oportunidad. La demanda de vivienda digna en este municipio es importante, la de comercios específicos que hagan más inclusivos y habitables los fraccionamientos también, los 3 órdenes de gobierno deben canalizarlas de manera ordenada y sustentable YA.
*Laura Barranco es Licenciada en Comunicación Social por la UAM – X, ex Secretaria de Medio Ambiente en Naucalpan y Certificada en Administración de Acciones para la Protección y Preservación del medio Ambiente, Biodiversidad y el Desarrollo Sostenible por el Instituto Hacendario del Estado de México.
@LAURABARRANCO