Ya hay que pararle con los parches. Es tiempo de plantear una respuesta integral, oportuna y contundente para el reto habitacional y dejar de privilegiar los inútiles parches a las políticas urbanas y de vivienda.
Por Horacio Urbano*
La Ciudad de México enfrenta la que desde hace mucho tendría que haber sido considerada una grave crisis de vivienda, traducida en que la chilangada cada vez enfrenta mayores problemas para hacer frente en forma eficiente a su muy particular reto habitacional.
Cada vez se producen menos viviendas, y las que se llegan a producir cada vez están más caras, son más chicas, y están más lejos, en tanto que las rentas también se han elevado en niveles muy superiores a los ingresos de quienes deberían habitarlas, provocando que mucha gente tenga que vivir en precariedad.
Y a esto se suma que muchos más tienen que dejar los barrios en que crecieron, porque ya no pueden pagar los altos costos de vivir en ellos y se tienen que ir, si bien les va, a una de las ciudades dormitorio de las periferias, si no es que les toca arreglar su problema por la vía de un asentamiento informal, para, en ambos casos, gastar muchas horas de sus días trasladándose de sus casas, a sus trabajos y escuelas.
Y claro, también padecen su personal reto habitacional quienes habitan viviendas sin papeles, o quienes lo que necesitan o pueden es mejorar o autoproducir su casa, o quienes habitan, en propiedad o rentando, viviendas que no cumplen con los siete criterios que de acuerdo con la ONU definen una vivienda adecuada…
Viviendas que, en muchos casos, no cuentan con servicios públicos, tienen pisos de tierra o techos de lámina, no tienen baños o cocinas, o están construidas fuera de toda norma y con materiales precarios.
Basta recorrer los diferentes criterios que definen la estructura de una sociedad para entender los alcances de la crisis de vivienda.
Los más pobres, y en especial los que habitan en zonas urbanas, tienen prácticamente inexistente acceso a la vivienda, lo mismo que los jóvenes, los adultos mayores o una amplia gama de grupos vulnerables.
Y esto sin importar si lo que quieren o pueden es comprar, rentar, construir, legalizar o compartir su casa,y para hacerlo requieren esquemas de producción, financiamiento y subsidio, que en la mayoría de los casos hoy no existen.
No es vida…
O al menos no es la vida urbana que quisiéramos tener, ni la que tendría que ser objetivo fundamental de quienes gobiernan nuestras ciudades.
Y esto, ni es cosa nueva, ni es algo ajeno a lo que esté pasando en otras ciudades del país, y, en realidad, del mundo entero.
Pero ya lo decía mi abuela: “mal de muchos, consuelo de pendejos”… Y no, un chilango no se siente mejor por estar compartiendo sus mismas miserias urbanas con un neoyorkino o un parisino.
Por donde se le vea, y dicho en términos poéticos: está de la chingada.
Y claro, la gente lo sufre y eleva la voz en busca de que sus gobiernos reconozcan el problema y se comprometan con su solución.
Lo malo es que hasta ahora los gobiernos y los legisladores no habían querido escuchar y poco interés habían puesto en generar soluciones.
Digo, porque si lo hubieran hecho, seguramente veríamos mas y mejores productos y estrategias para enfrentar la crisis.
Y el caso es que desde la sociedad han crecido los llamados a dar respuestas al reto habitacional, con muy especial énfasis en la vivienda en renta, señalando hasta el cansancio el encarecimiento, la debilidad del oferta, los excesivos requerimientos para el inquilino, la evidente informalidad del mercado y los fantasmas del tema de moda: la gentrificación.
Y es el caso que el gobierno capitalino pareciera haberse dado por enterado de estas voces y para darles respuestas organizó un foro enfocado a los retos de la vivienda en renta…
Error… Porque ver en forma aislada este vertiente del problema impide generar una solución integral, que reconozca todas las vertientes del reto y genere una solución de gran calado, para, al contrario, pretender dar soluciones parciales que no son más que un nuevo parche a una políticas urbana y de vivienda más que obsoletas, y que solo tienen vida artificial por la vía de los parches.
Parches que no resuelven problemas de fondo como, pensando en la vivienda en renta, la informalidad del mercado, los ya míticos nómadas digitales o pensar en regular precios de las rentas…
Parches que al momento de hacer una reingeniería de las políticas públicas urbanas y de vivienda, son como, volviendo a citar a mi abuela, “jalar la cobija para tapar los hombros sin darse cuenta de que al hacerlo se descobijan las patas”.
In-te-gral… La Política de Vivienda debe ser integral… Generando soluciones adecuadas para cada vertiente de la demanda, que operen en forma armónica entre ellas, para que las respuestas para la vivienda en renta, de alguna forma inciden en lo que se proponga para la vivienda nueva, las mejoras, la construcción o, incluso, la regularización, o el estudio de nuevas modalidades de producción, financiamiento y ocupación.
¿Se puede avanzar con los retos de la vivienda en renta? Claro, pero considerando que esas respuestas son parte de una respuesta integral para todos los retos de la vivienda.
Ya hay que pararle con los parches.
Es tiempo de plantear una respuesta integral, oportuna y contundente para el reto habitacional y dejar de privilegiar los inútiles parches a las políticas urbanas y de vivienda.
¿Necesitan crédito para vivienda?
Es normal que me escriban pidiendo consejos relacionados con temas inmobiliarios y siempre es un gusto darles respuestas.
Pero de un tiempo a la fecha, cada vez recibo más mensajes pidiendo consejos para obtener un crédito hipotecario, así que vamos a hacer algo más contundente.
El consultorio está abierto…
¿Necesitan crédito para comprar una vivienda o para construir un desarrollo habitacional?
Si la respuesta es sí, los invito a que me escriban para darles opciones que les permitan tener una solución que en verdad responda a sus necesidades.
Sin pena, díganme si necesitan un crédito hipotecario individual para comprar, remodelar o construir, o un crédito puente para desarrollar vivienda, y con gusto les digo qué es, cómo funciona, y cómo y con quién obtenerlo.
Propuestas de vivienda
En un contexto en que habría que reconocer retos y proponer soluciones, y en el análisis de las políticas de vivienda del futuro, aproveché este espacio para abrir una lista de propuestas, que prometo enriquecer, soltando cada semana tres ideas simples, que se irán sumando para aportar elementos al complejo proceso de modelar una respuesta eficiente, oportuna y suficiente, al reto habitacional.
Los invito a sumarse a esta iniciativa. Mándenme sus propuestas y las iremos incluyendo en este recetario.
Esta es la vigésimo quinta entrega de esta serie, que contaba ya con 72 ideas, dejo aquí tres temas más, y con ellas, ya van 75:
Setenta y tres. Asegurarse de que al conformar una Política Nacional de Vivienda, ésta sea resultado de un sistema armónico, vinculado y homologado, de políticas de vivienda de orden local, con especial énfasis en las de alcance metropolitano y regional, creando modelos replicables e instrumentos técnicos, legales y financieros, que ayuden en su conformación.
Setenta y cuatro. Desarrollar un mapa de actores de índole local e internacional, que tengan o puedan tener impacto en ciudades y viviendas, estableciendo con ellos puentes desde la federación, complementados con canales que permitan ponerlas al alcance de los gobiernos y organismos de planeación locales.
Setenta y cinco. Conformar desde la banca de desarrollo instrumentos que permitan que los gobiernos locales tengan el necesario acceso a canales de capital y financiamiento encaminados, tanto a financiar la transformación de sus políticas urbanas y de vivienda, como, llegado el caso, a financiar proyectos específicos ya en esa línea de acción.
Van 75 ideas… Y aquí seguiremos soltando otras y buscando quién les preste atención.
Los invito a conocer Vivienda 360/Vivienda para Todos. Un documento que estamos generando en Centro Urbano con el objetivo de agrupar, organizar y presentar estas ideas.
Es en esencia un recetario que propone tres temas urgentes, tres acciones esenciales, y una caja de herramientas para entender y atender el reto habitacional.
Los invito a leer, compartir y aportar ideas. Vamos ya en la cuarta actualización de este documento. Un documento vivo, que se estará actualizando periódicamente, agregando, depurando y afinando… Agregando, depurando y afinando… Agregando, depurando y afinando…
Aquí les dejo la liga: https://centrourbano.com/revista/publicaciones/360o-vivienda-para-todos/
*Horacio Urbano
Presidente de Centro Urbano