Hemos llegado al quinto mes de 2019, a vísperas de iniciar la segunda parte del año. Atrás quedó abril, mes que en una primera instancia se llegó a catalogar como el que sería el mes de la vivienda. Y es que las autoridades habían señalado que sería en el cuarto mes de 2019 cuando se presentarían temas importantes, como la Nueva Política de Vivienda.
Ya corre mayo y las grandes noticias que esperaba el sector vivienda no se han dado. Por un lado, entre los grandes pendientes que espera la industria es la presentación en forma de la Nueva Política de Vivienda. Si bien el secretario Román Meyer presentó un decálogo, aún no hay un lanzamiento formal que permita conocer a profundidad las líneas que guiarán el tema.
Por otro lado, el Plan Nacional de Desarrollo no le dio la suficiente importancia al tema de vivienda. Si bien es un planteamiento general y faltarían los programas sectoriales, al ser el sector vivienda un motor importante de la economía mexicana, se esperaba dedicar un poco más de profundidad al tema. Contrario a eso, la visión federal sólo el otorgó cuatro párrafos a los temas de vivienda y desarrollo urbano, en donde lejos de mostrar los objetivos o la visión a instaurar a larga plazo, se limitaron presentar las acciones que emprenderán las autoridades en 2019, destacar lo que se ha hecho, y presumir como suyo lo hecho por el Infonavit, que hay que recordar que este organismo no es gobierno.
Hacia futuro la incertidumbre sobre la fecha para conocer las directrices del sector vivienda es latente. Lo unió cierto en este marco es que la ley prevé que las autoridades tendrán 180 días para emitir los programas sectoriales que derivan del Plan Nacional de Desarrollo, lo que supondría ya tener un panorama más claro sobre el sector, con los puntos que serán el actuar de la Sedatu en el rubro.
En el caso de Infonavit, que en los últimos meses ha cobrado una relevancia importante al ser puesto en el papel como la Institución que mantendrá en ritmo a la industria ante el cambio en materia de subsidio, para abril se preveía la presentación del tan anhelado programa para elevar los montos de crédito para trabajadores de bajos salarios. Lo cierto es que el esquema no salió y seguimos a la expectativa.
Sobre el tema, no hay que olvidar que justo los sectores Empresarial y Laboral ya se posicionaron al respecto, y hablaron de la voluntad de ambas partes por votar y aprobar este incremento en la capacidad de compra este mes.
El tema es que ya casi es medio año y la pregunta es: ¿cómo cerrará el sector? Ya se habla que la reducción en el subsidio ha pegado en la vivienda social en las dos vertientes: por un lado, se han dejado de colocar viviendas, y por otro, ante la falta de claridad en las reglas, se han detenido proyectos en este segmento.
La medida salvadora que aparece en el escenario es el aumento en los montos del Infonavit. Como lo hemos mencionado, si se da, será un factor que le dé un giro de fondo a la industria, que dejará de depender de su droga llamada subsidio para mantener el paso. El hecho es que, si es cierto que este aumento se aprueba en mayo, los cambios necesarios para adecuar el sistema del Infonavit, la implementación del esquema como tal, llevará otros meses más, por lo que hablamos que el modelo tendría impacto ya avanzado el segundo semestre.