Pues no, el índice de confianza en nuestra economía sin duda no vive sus mejores momentos de cara a un nuevo año que se antoja vuelva a ser de bajo crecimiento y alta volatilidad, marcado nuevamente por la turbulencia mundial, con el peso tirando aceite y el fantasma de Trump acechando…
Ante este complejo escenario, es evidente que empresas y organismos públicos, más que apanicarse y caer en oración, deben ajustar sus planes para el 2017 y tomar acciones específicas que les permitan cruzar el pantano sin mancharse (o manchándose lo menos posible).
En el caso de la vivienda hay que decir que sus mayores organismos federales, Infonavit, de David Penchyna y Fovissste, de Luis Godina anunciaron la semana pasada ajustes importantes en su operación.
Infonavit anunció dos cosas; que mantendría sin incremento sus tasas de interés y el incremento de su monto máximo de crédito, que queda ahora en 1 millón 552,000 pesos, lo que sin duda será un poderoso motor para impulsar la vivienda urbana que requiere la clase media.
Fovissste por su parte, anunció que el del jueves de esta semana será su último sorteo de créditos, y que a partir del año próximo utilizarán para otorgar financiamientos un sistema de puntos muy similar al del Infonavit, lo que sin duda representa un beneficio para su derechohabiencia y eficiencia para el sector.
Los desarrolladores de vivienda también están haciendo su chamba, ajustando sus estrategias sobre la lógica de que habrá menos subsidio, apostando por los esquemas de autoproducción asistida vía subsidio, o de plano migrando a segmentos de mayor ticket promedio.
Por su parte, la titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Rosario Robles Berlanga, ajusta su equipo al llevar a Jorge Wolpert, que tiene ya muy buena experiencia en estos temas, a dirigir la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi).
Los invito a seguir mi cuenta de Twitter: @horacio_urbano y a ver Vivienda en Verde TV, que se transmite por Green TV y Efekto Noticias.