EcommerceDB indicó que entre el 2022 y el 2027, el comercio electrónico crecerá a un ritmo anual de 17%, por lo que necesitará mayor infraestructura industrial
Debido al interés por cubrir las necesidades del incremento del nearshoring, México ha aumentado su infraestructura industrial. Esta acción, también ha propiciado el crecimiento del ecommerce, ya que ha aprovechado la expansión de los centros logísticos.
Esto se debe a que, de acuerdo con la Asociación Mexicana De Parques Industriales Privados (AMPIP), en tres años, los parques industriales en el país pasaron de 350 a 425 distribuidos en 27 estados, no obstante, los espacios se concentran principalmente en las zonas norte, centro y bajío de México.
Al respecto, Mario Miranda, Co-CEO y CRO de Infracommerce Latam, afirmó que el ecommerce ha aprovechado la nueva oferta industrial en puntos clave del país, de esta forma esta modalidad de comercio cuenta con una logística más eficiente.
“El ecommerce ha sabido usar estos espacios, aprovechando que están ubicados en zonas estratégicas, cerca de las ciudades y áreas industriales. Si el ritmo de crecimiento de estos parques continúa, esto se traduce a mayores herramientas de entrega, almacenamiento y logística inversa para el comercio digital”, comentó.
En ese sentido, EcommerceDB, analista del mercado, estima que entre el 2022 y el 2027 el mercado crecerá a un ritmo anual del 13%, alcanzando así, un valor de 60,700 millones de dólares (mdd). Por ello, crecimiento del sector provocará el aumento en la demanda nuevas naves industriales y bodegas, ya no sólo dentro de las ciudades.
Infraestructura industrial para el ecommerce
Infracommerce Latam señaló que las dimensiones preferidas son mayores a los 2,000 metros cuadrados (m²) ubicados a las afuera de ciudades como la Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara y Nuevo León. Además, los especialistas esperan que continúe la demanda de cedis regionales de entre 3,000 y 10,000 m².
Asimismo, también se estima que para el 2025, sean duplicados los espacios destinados a logística. Esto a pesar de que, de acuerdo con Miranda, en los últimos años, espacios destinados a servicios de última milla han aumentado.
“Hemos notado que los comercios digitales están aprovechando los inmuebles industriales para usarlos como puntos de distribución, almacenamiento, entrega y sobre todo hay un crecimiento en la logística inversa para devolver, reparar o reciclar insumos tanto para el modelo B2B y B2C”, platicó
