Solili aseguró que los proyectos de oficinas que inicien este 2022 acotaran los tamaños de inversión y optarán áreas netas que resulten de fácil absorción
De acuerdo con Solili, durante el 2021 y lo que va de 2022 la construcción de oficinas ha sido escasa en gran parte del país; además de que los proyectos que han iniciado su desarrollo corresponden a edificios de formato pequeño, en promedio de 1,500 a 3,000 metros cuadrados (m²).
Además, dichos proyectos se ubican en zonas no tradicionales; es decir, localizaciones estratégicas donde la sobreoferta no registra los altos valores que se observan en los principales corredores de las ciudades mexicanas.
Solili aseguró que los proyectos de oficinas que inicien este 2022 acotaran los tamaños de inversión y optarán por áreas netas que resulten de fácil absorción; así como un riesgo medido sobre la base del tamaño de inversión.
Asimismo, destacó que el formato de usos mixtos será clave para minimizar la exposición al riesgo de construir únicamente oficinas. Lo anterior, por lo menos hasta que se aclare el panorama de las empresas y se cierre la brecha de la vacancia.
La firma indicó que, al cierre del primer trimestre del 2022 (1T2022), en la Ciudad de México iniciaron cuatro nuevas construcciones; aún en medio de una vacancia promedio de 23.1%. Dichas edificaciones se ubican sobre los corredores Insurgentes y Reforma, y pertenecen a las categorías A y B.
Estas zonas destacan por la marcada presencia del componente residencial, que genera para los inquilinos un menor desplazamiento; además de que han mejorado su perfil de seguridad sobre la base de la mezcla de usos.
“La mezcla de comercio a pie de calle con edificios de oficinas entremezclados con edificaciones multifamiliares, han sido el gran atractivo tomado de colonias emblemáticas como Roma, Condesa, Nápoles y Narvarte; pero ahora pueden ser edificados sobre zonas de mayor seguridad sísmica”, señaló Solili.
Por otro lado, durante 2021 prácticamente no iniciaron nuevas construcciones en mercados medianos y emergentes; aunque en el caso de Querétaro, durante el 2022 podrían iniciar tres proyectos de reconversión de oficinas a departamentos.