El Museo Franz Mayer, fue considerado en 1981 como un monumento histórico de Fideicomiso Cultural por su amplia trayectoria de reconstrucción e historia.
Es reconocido como uno de los museos que cuenta con una amplia gama de artes decorativas, además de presentar exposiciones temporales de diseño y fotografía hechas con diferentes materiales o estilos del Siglo XVI al Siglo XIX, de México, Europa y el Oriente.
Antes de convertirse en museo, fue un hospital para personas de clase social alta, mismos que podían gozar de los mejores servicios. Años después, el médico español, Pedro López, creo una casa y un hospital para niños abandonados y personas que no fueran admitidas los hospitales de la zona.
Posteriormente fue un convento donde se continuaba con las labores de atención, pero en la época de los frailes juaninos se volvió a modificar el lugar ya que el conjunto hospitalario se hizo de una nueva iglesia y fue remodelado en su totalidad, aunque muy pronto el templo sufrió un incendio. En 1820 fueron expulsados los religiosos que por más de 200 años habían resguardado y atendido el lugar.
Se sabe que fue utilizado como cuartel militar, escuela de niñas, convento de monjas, dirección de sanidad hasta convertirse en el hospital de la mujer.
Con la irrupción de la modernidad en el país, en el marco de los Juegos Olímpicos de 1968, culminó otra etapa de la historia de un recinto que durante siglos sirviera principalmente como hospital. A partir de ese año, albergó una muestra de
artesanías que con el tiempo se convirtió en un mercado permanente, hasta que los daños de la estructura del edificio obligaron a desalojarlo. En 1981 el Gobierno Federal concesionó el monumento histórico al Fideicomiso Cultural Franz Mayer, para establecer un museo que tras un arduo proceso de restauración, abrió oficialmente sus puertas al público el 15 de julio de 1986.
Actualmente, el Museo Franz Mayer cuenta con piezas hechas de hierro, carey, marfil, vidrio, esmaltes y lacas mismas que recapitulan la trascendencia del museo, tiene colecciones que fueron donadas por artistas reconocidos y exposiciones temporales. Los temas que han presentado son de platería, cerámica, mobiliario, pintura y estampa.
El museo además de brindar conocimiento para todo tipo de público, aporta otros servicios como la renta del Claustro, auditorio, sala de amigos, sala Eugenio Sisto, sala de usos múltiples y biblioteca y fue sede en 2013 de la entrega del Premio Hombres y Mujeres de la Casa.