El Instituto de Ingeniería de la UNAM, NACO y Arup realizaron la revisión
Las técnicas de construcción que se implementan en el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), son supervisadas por el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Netherlands Airport Consultants (NACO) y la empresa internacional de ingeniería Arup.
Además de la participación de un grupo de especialistas nacionales e internacionales en geotecnia y mega proyectos de infraestructura.
Tan solo en el Edificio Terminal, la Torre de Control y el Centro de Transportes Terrestres, lado tierra del NAICM, se utiliza la técnica de losa de cimentación sobre pilotes, que brindan solidez y capacidad de carga al suelo.
Asimismo, las pistas dos, tres y seis, y las calles de rodaje, se construyen con el sistema de precarga para la consolidación del suelo y así disminuir asentamientos en el futuro. Con esto pretenden alargar la vida y funcionamiento de dichas estructuras, para que el mantenimiento se de en periodos más largos.
Después de realizar una auditoría técnica a las cimentaciones de la Torre de Control y al Edificio Terminal, tras los sismos registrados en septiembre, se comprobó la solidez de las estructuras del NAICM, ya que las construcciones respondieron favorablemente a los movimientos sísmicos sin presentar hundimientos.
Así lo explicaron expertos a la Comisión Especial de Seguimiento del proyecto, integrada por diputados federales que visitaron las obras.
En la visita, también se dio a conocer que son 292 empresas las que trabajan en la construcción del NAICM, mega construcción que ha generado 40,000 empleos.
El presupuesto para las obras se ha registrado en la Cartera de Inversión de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público desde 2014, que asciende a un valor de 186,000 millones de pesos, derivada de las actualizaciones anuales por inflación que dicha secretaría hace a todos los proyectos registrados en esa cartera.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), colabora con el NAICM en materia de gobierno corporativo y gobernanza, además cuenta con la supervisión de un Comité de Ética y es coordinado por la Secretaría de la Función Pública para el seguimiento y rendición de cuentas del proyecto.