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Retos para construir Torre Reforma

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Es importante realizar los estudios necesarios para entender los diferentes flujos

 

El arquitecto mexicano Benjamín Romano, responsable de la construcción de Torre Reforma, asistió a la Feria Internacional de Arquitectura y Ciudad Mextrópoli 2017, para hablar sobre el desarrollo de la planeación y construcción de dicho edificio.

 

Comenzó con la breve explicación de la importancia de realizar los estudios necesarios para entender los diferentes flujos desde solucionar cómo se va a transportar la gente en el edificio hasta los flujos de energía, de agua, drenaje, vehicular y del aire para un buen desarrollo arquitectónico.

 

Durante la planeación, uno de los aspectos más importantes a considerar fue la previsión de sismos, para lo cual era necesario trabar los dos muros de concreto de la estructura y permitir apoyar la carga del edificio hacia los muros y bajarla a la cimentación.

 

El edificio cuenta con 1,100 cajones de estacionamiento, este espacio cuenta con una rampa permanente de acceso, una de salida y un sistema robótico, dicho sistema pide un espacio de 1.80 metros de altura, y en lugar de eso se hizo de 3 metros, para que eventualmente se pueda reciclar un 50% del espacio.

 

El estudio sobre el flujo del aire se realizó en la universidad de Harvard, donde se entendió como debe comportarse un edificio respecto al clima y el ambiente, información que permitió generar un diseño interesante para bloquear el sol de la fachada importante y actuar en consecuencia del aire para la creación de las terrazas.

 

El sótano de la torre está destinado a una zona de comida y los primeros pisos a un centro deportivo, los pisos posteriores son oficinas. Sobre la estructura de la torre, el arquitecto dijo que no quería interferir en el espacio interior con el uso de columnas “el edificio e sí es una columna hueca”, indicó.

 

En cuanto a la casa donde se encuentra el lobby de la torre, fue movida 18 metros hacia el norte para poder ocupar el espacio subterráneo de la casa; para esto se hicieron ranuras de 70 centímetros en la cantera original de la casa, se pasaron varillas en ambas direcciones y crearon una losa ventricular. Para mover la casa se necesitaron alrededor de 11 horas, para devolverla a a su lugar únicamente 3 horas.

 

Finalmente, respecto a la colaboración que recibió por parte personas extranjeras, aseguró que México se encuentra a la vanguardia en arquitectura e ingeniería, sin embargo, lo que falta es promoción fuera del país, pues para tomar una decisión, los inversionistas toman en cuenta la experiencia en trabajos previos y su reconocimiento.

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Hanae Pacheco


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