El proceso trata de generar una dinámica que permita a las comunidades indígenas reflexionar y dialogar entre sí sobre sus necesidades, así como las limitantes que tiene el proyecto para generar bienestar
El gobierno federal ha establecido un proceso de diálogo que busca involucrar a las diversas comunidades indígenas que habitan en las zonas que recorrerá el Tren Maya. Esto, en el marco de la fase de seguimiento de acuerdos del proceso de consulta indígena sobre el mega proyecto.
Encabezado por la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, el proceso trata de generar una dinámica que permita a la población reflexionar y dialogar entre sí sobre sus necesidades, así como las limitantes que tiene el proyecto para generar bienestar. De igual forma, se busca identificar que acciones debe seguir el gobierno para resolver las problemáticas existentes en estas comunidades y poder generar un desarrollo inclusivo.
Para la realización de este ejercicio se implementaron 70 mesas de trabajo, en las que participaron más de novecientas personas. Los ejes temáticos en estas mesas fueron Bienestar, Medio Ambiente, Desarrollo Económico Inclusivo, Patrimonio Cultural, Infraestructura local y Ordenamiento Territorial.
Bajo un ambiente de cordialidad, entusiasmo y siguiendo las medidas de sana distancia, estas sesiones tuvieron lugar en los cinco estados donde se implementara el proyecto y contaron con la participación de observadores nacionales e internacionales en materia de protección y respeto de los derechos humanos.
En un comunicado de prensa, el Gobierno de México señalo que con este tipo de ejercicios «reitera su compromiso de atender las condiciones de rezago de los pueblos indígenas, así como de implementar acciones duraderas para su empoderamiento ciudadano e inclusión en las decisiones de los grandes proyectos que impulsan el desarrollo con bienestar en el país».
