El personal ocupado en la construcción cayó un -22.5% con respecto a 2019; las horas trabajadas se redujeron en un -28.2% y la remuneración media -1.4%
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dio a conocer los resultados de la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC) para mayo del año en curso. Es importante recordar que mayo fue el segundo mes completo con la Jornada Nacional de Sana Distancia (JNSD) como medida principal para contener la propagación del Covid-19 y conservar la capacidad de atención en hospitales.
En este contexto, los números que miden el comportamiento de la industria de la construcción tuvieron una dinámica drásticamente descendente, tanto en la variación anual como en la relacionada al mes previo, abril.
El Inegi encontró que el valor de la producción de la construcción para mayo de 2020 cayó un 34.2% con respecto a mayo de 2019, su dinámica, explicada en gran medida por la coyuntura sanitaria y el cierre de obras en la JNSD desde marzo-abril, es similar a la del mes de abril cuya caída fue de 32.1%.
Cabe mencionar que este indicador no aumenta desde febrero de 2019, para el mes de febrero de 2020 la caída fue del 15.6% y en marzo, donde la cuarentena dio inicio en la segunda mitad de ese mes, el retroceso fue de 17.1 por ciento.
Obreros de la construcción, los más afectados
En la Encuesta a las Empresas Constructoras se encontró también que el personal ocupado total se redujo una quinta parte (-22.5%). En su mayoría, la reducción se registró en los obreros de la empresa constructora, cuya variación ascendió a -27.7%; en el caso de los empleados, la reducción fue de -10.2%.
En cuanto al número de horas trabajadas, la variación a la baja fue del orden de -28.2%; su desglosado mostró que en los obreros es donde hubo el mayor descenso con –32.3% del tiempo trabajado mientras que en el caso de los empleados la variación fue de -18.6%.
Otra de las variables que evidenció el mayor impacto para el personal obrero fue la de las remuneraciones netas reales; se registró una caída de 6.8% para los salarios pagados a obreros frente a una leve variación de -0.2% a los sueldos de los empleados.
