La Oficina de Sismos del INAH informó que hay 565 inmuebles en proceso de restauración, y en otros 785 se llevan a cabo estudios previos y proyectos de intervención
El director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, informó que, a dos años de los sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017, se han restaurado y entregado 990 inmuebles históricos de los 2,340 que resultaron dañados, lo que representa un avance del 42 por ciento.
Señaló que la intervención del patrimonio histórico no se puede hacer de manera acelerada, pues se deben respetar materiales y técnicas constructivas originarias, así como las normas internacionales de restauración, por lo que se requieren estudios previos a la ejecución de cualquier trabajo.
“Lo que se busca es asegurar que al ser restaurados queden mejor y estén en condiciones de soportar algún otro movimiento telúrico que pueda presentarse. Este es un tema importante que también tiene que ver con los recursos. El seguro se compromete a financiar la reparación del daño para que el inmueble quede como estaba antes del sismo, sin embargo, previamente muchos monumentos históricos no estaban bien, tenían intervenciones inadecuadas, falta de mantenimiento, daños previos que esa subvención no reconoce”, dijo.
Asimismo, Prieto dio a conocer que el INAH ya cuenta con todo el esquema financiero para atender los daños en los 1,350 inmuebles restantes, recursos que provienen del seguro que contrata la institución, del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) o de fundaciones, organizaciones, grupos empresariales, de las propias comunidades y de algunos gobiernos que solidariamente colaboran en la recuperación del patrimonio cultural lesionado.
Por su parte, el arquitecto Salvador Camarena, coordinador operativo de la Oficina de Sismos del INAH, mencionó que, aunado a los 990 inmuebles ya terminados, hay 565 en proceso de restauración, y en otros 785 se llevan a cabo estudios previos y proyectos de intervención.
Además, detalló que de los inmuebles concluidos 325 corresponden a Puebla, 217 al Estado de México, 118 a Morelos, 91 a Tlaxcala, 79 a Oaxaca, 58 a Guerrero, 47 a Chiapas, 26 a Tabasco, 14 a Veracruz, ocho a la Ciudad de México y siete a Hidalgo.
“Lo hecho a la fecha ha sido un reto muy grande, toda vez que el INAH no es una institución que tenga como misión hacer obra, es una instancia normativa, pero debido al daño ocasionado por los sismos, se convirtió, de alguna manera, en ejecutor, para resolver cada uno de los daños en los estados afectados”, puntualizó.