La Reunión de Gestores del Patrimonio Mundial 2019 busca exponer problemáticas de sitios catalogados, así como diseñar estrategias para disfrutar responsablemente de esos espacios
Con el objetivo de exponer problemáticas de los sitios catalogados como patrimonio y diseñar estrategias para concretar acciones que permitan su disfrute social y responsabilidad en la conservación, se reunieron gestores del Patrimonio Mundial 2019, en el Museo Casa de Carranza, en la Ciudad de México.
Uno de los puntos que destacan en la reunión es la petición de Diego Prieto, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en la que instó a los participantes no “cercar” ni “momificar” la herencia cultural de zonas y monumentos arqueológicos catalogados por la UNESCO, sino, por el contrario, involucrar a la población, para que sean los habitantes los primeros interesados en cuidar los espacios.
Derivado de los eventos adversos como el creciente y a veces descontrolado flujo de visitantes y la carencia de mecanismos y herramientas de planeación adecuados, se señaló que es necesario contar con medios de protección y subsistencia sostenibles del patrimonio cultural.
Se dieron propuestas en torno a hacer que las zonas arqueológicas catalogadas como Patrimonio Mundial tengan un rango más que los sitios AAA, para que esto se traduzca en la posibilidad de conservar, difundir y gestionar los valores por los cuales fueron inscritos el listado.
La obra ferroviaria del Tren Maya, puede ser considerada una oportunidad para regular muchos aspectos de coyuntura en la gestión de zonas arqueológicas como Chichén Itzá, como el ambulantaje y el turismo en gran escala.
Además, la gran problemática de Palenque, que se resume en especulación inmobiliaria, inseguridad, caza furtiva, extracción de recursos maderables, nuevas modalidades de turismo que generan “senderos alternos” a los recorridos establecidos en la zona, problemas que, en mayor o menor medida se presentan en otros sitios.
Cabe destacar que México es uno de los países con más bienes inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO; esto conlleva una gran responsabilidad para las dependencias implicadas en la conservación y preservación del patrimonio cultural y arqueológico de la nación debido a la confluencia de varios ámbitos de interés.
Este conjunto de esfuerzos busca desembocar en darle continuidad a lo estipulado en el Plan de Acción para el Patrimonio Mundial en México y América Central (PAMAC) 2018-2023, que busca aumentar la credibilidad de la Lista del Patrimonio Mundial, garantizar la conservación eficaz de los bienes inscritos, promocionar capacitación en los Estados parte, así como elevar la sensibilización, participación y el apoyo público al Patrimonio Mundial, a través de la comunicación.
