Las obras del reconocido arquitecto mexicano, Pedro Ramirez Vázquez, Hombres y Mujeres de la casa y Cimientos, son un símbolo de lo que significa la vivienda para quienes la habitan y de una sociedad que evoluciona gracias al impulso del desarrollo habitacional.
Representan los valores de los Hombres y Mujeres que dirigen las empresas e instituciones del sector; hablan de sencillez, exactitud, transparencia y constancia, a través de una clara metáfora donde un prisma de cristal- la casa en su máxima expresión- se mezcla con la luz y entorno para reinventarse en la forma constante como hace la industria de la vivienda.
Desde que el Premio Hombres y Mujeres de la Casa fue creado, ambas esculturas son su mayor símbolo.