El premio lo dio el banco alemán KfW Banco de Desarrollo por fomentar las viviendas sociales
El Grupo KfW otorgó el Premio de Construcción 2017, en su categoría Premio especial internacional KfW de Construcción, al programa EcoCasa, implementado por la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF) y que contribuye a la protección del clima mundial.
“El ganador del premio especial fue seleccionado por un equipo de expertos del KfW Banco de Desarrollo. Con EcoCasa, el gobierno mexicano ha implementado un programa para fomentar la construcción de viviendas sociales y energéticamente eficientes. Las casas con ahorro energético consumen 20% menos energía que los edificios de viviendas convencionales, son un proyecto emblemático para la construcción de viviendas con eficiencia energética en países emergentes”.
Gunther Adler, secretario de Estado del Ministerio de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza, Construcción y Seguridad Nuclear e Ingrid Hengster, miembro de la Junta Directiva del KfW, fueron quienes entregaron los premios a los galardonados.
“Con el Premio KfW de Construcción 2017, se premia desde hace 15 años la construcción sostenible desde el punto de vista energético, destacando con ello también las tendencias innovadoras en Alemania. Los ganadores han logrado un equilibrio excelente entre arquitectura innovadora, integración armónica en el entorno y el confort sin barreras. El premio especial internacional se ha concedido a un ejemplo extraordinario en México, en el que se ha conseguido un espacio habitable social y energéticamente eficiente”, dijo Hengster.
“Las soluciones galardonadas con los premios KfW son impresionantes. Demuestran cómo se puede lograr la ampliación o remodelación de edificios según las necesidades. Los propietarios premiados pueden inspirar a otros inversores a crear espacio habitable de una manera sostenible, flexible y energéticamente eficiente”, agregó Adler.
El primer premio se les otorgó a 10 familias y parejas se han agrupado para lograr la conservación y la reactivación del conjunto de fincas Kastanienhof de Kaulsdorf, en Berlín, el resultado fue un trío de edificios que combinan lo nuevo y lo antiguo, además es accesible y energéticamente eficiente.
El segundo premio fue para una comunidad de 20 propietarios ha conseguido transformar un complejo de edificios viejos en un barrio bohemio de Leipzig, en lofts y viviendas amplias y económicas situadas en edificios antiguos.
Mientras que el tercer lugar lo obtuvieron Daniel y Tina Seibert, que remodelaron el edificio trasero de un comercio en una casa de viviendas, en donde aplicaron soluciones variables, las dos viviendas se pueden ampliar o reducir según sea necesario, lo que permite vivir de forma independiente en el centro de Stuttgart, con un ambiente urbano e individual.
En el caso de la casa señorial de la Baja Edad Media, en el casco antiguo de Érfurt, adquirió un nuevo esplendor gracias al propietario de la construcción, Frank Orschler. Las capas del pasado se descubren con cuidado y crean un nuevo espacio habitable en un ambiente histórico con un moderno confort. Este proyecto tuvo el cuarto lugar.
El quinto premio fue para el proyecto que conjuga comodidad y vanguardia en una casa de 80 años en la Alta Baviera, con valor literario e histórico.
“El jurado estuvo presidido por Hans Kollhoff, arquitecto en Zúrich y Berlín. Los premiados han reconvertido edificios comerciales antiguos o edificios agrícolas actuales, revitalizado plenamente edificios declarados monumentos históricos o modernizado edificios de viviendas existentes. La excelente arquitectura, por una parte, ha permitido alcanzar con creces los elevados estándares de las casas eficientes del KfW y, por otra parte, ha implementado hábilmente medidas para eliminar barreras”, detalló el Banco.
El jurado está formado por planificadores urbanos y expertos en energía, arquitectos y representantes del sector de la construcción y vivienda, de los medios y del KfW.
