El apoyo será equivalente al 100% del impuesto al valor agregado que se cause por la prestación de los servicios parciales de construcción de bienes inmuebles destinados a casa habitación
Hoy se dio a conocer una medida de carácter fiscal de impulso para el sector vivienda que consiste en un estímulo fiscal equivalente al 100% del impuesto al valor agregado que se cause por la prestación de los servicios parciales de construcción de bienes inmuebles destinados a casa habitación.
El Secretario de Hacienda Luis Videgaray destacó que “el estímulo permitirá que quienes proporcionen los servicios mencionados no trasladen a las empresas desarrolladoras de vivienda el impuesto al valor agregado. Por consecuencia, dicho impuesto tampoco se trasladará a las familias que adquieran una vivienda.”
Por su parte, el Secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Jesús Murillo Karam resaltó el valor de la iniciativa. “Con esta medida se atienden necesidades sociales, que generan empresas más sanas y un sector menos concentrado y por consecuencia, más desarrollo y mejor empleo”.
El estímulo se suma a las medidas fiscales en materia de vivienda que entraron en vigor desde enero pasado. Éstas incluyeron la posibilidad para las constructoras de vivienda de que, en el caso de sus ingresos por ventas a plazos, el pago de ISR se determine únicamente con base en el ingreso efectivamente recibido durante el año, en lugar de basarse en el valor total de la venta de la vivienda.
Una vez disipada la incertidumbre jurídica que existía en torno al tratamiento para el IVA de los servicios de construcción que le prestan las empresas especializadas a los desarrolladores de vivienda, se estableció un esquema para que las empresas prestadoras de servicios parciales de construcción que tuvieran adeudos en el IVA pudieran regularizarse, y que ello se reconociera para efectos de su pago de ISR.
Este beneficio apoyará la economía de las familias mexicanas, facilitando un mayor acceso a viviendas dignas de menor costo. Además, se traducirá en un impulso a la actividad económica, a causa del papel estratégico que juega el sector construcción en términos de la generación de empleos y de la promoción de la inversión en la economía.