El acceso a tutoriales en redes sociales ha democratizado el conocimiento técnico en áreas como construcción de vivienda, plomería y albañilería
En los últimos años, plataformas como YouTube, TikTok, Facebook e Instagram se han convertido en referentes inesperados para miles de mexicanos que buscan construir o remodelar su vivienda.
Lo que antes era tarea exclusiva de trabajadores de la construcción experimentados, hoy se encuentra al alcance de cualquier persona con un teléfono inteligente y conexión a internet.
Desde levantar un muro hasta preparar una mezcla resistente, los tutoriales caseros se han transformado en manuales de cabecera para los llamados autoconstructores.
Este fenómeno se ha acelerado ante el aumento en los costos de la mano de obra y de los materiales de construcción, así como por la necesidad de miles de familias de encontrar alternativas de ahorro.
Una práctica extendida en México
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Vivienda 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), seis de cada 10 hogares en el país optan por la autoconstrucción como vía para acceder a una vivienda.
Esto significa que más del 57% de las casas, es decir, más de 20 millones de hogares, fueron levantadas por quienes las habitan.
El Centro Terwilliger de Innovación en Vivienda coincide en esta cifra y advierte que, en zonas urbanas, casi siete de cada 10 viviendas se edifican bajo este modelo.
Además, la autoconstrucción representa, además, más de la mitad del Producto Interno Bruto del sector vivienda, alcanzando un récord de 54.5% en 2023.
Ventajas y riesgos del aprendizaje digital
El acceso a tutoriales en redes sociales ha democratizado el conocimiento técnico en áreas como construcción, plomería y albañilería, lo que a su vez ha reducido la dependencia de formación académica formal.
Sin embargo, especialistas advierten que seguir un video al pie de la letra no siempre es suficiente, pues factores como el tipo de terreno, el clima y la disponibilidad de insumos varían entre regiones.
De ahí la importancia de combinar el aprendizaje digital con asesorías técnicas que garanticen seguridad, calidad y eficiencia en la obra.
“Las redes sociales son una gran herramienta para democratizar el conocimiento en construcción, pero es fundamental que el aprendizaje vaya acompañado de asesoría técnica. En Materiales San Cayetano Express creemos que una obra bien hecha comienza con un buen plan y materiales de calidad”, señaló Fernanda Montoya, gerente de Relaciones Institucionales de la firma.
Una tendencia con impacto social
La autoconstrucción de vivienda no solo responde a una necesidad económica, también refleja un impulso de autosuficiencia y resiliencia comunitaria. En muchas colonias, vecinos comparten experiencias y conocimientos adquiridos en internet, generando redes de apoyo que trascienden lo digital.
El fenómeno, además, plantea nuevos retos para las políticas públicas de vivienda: ¿cómo garantizar que estas construcciones cumplan con estándares mínimos de seguridad y habitabilidad?
La respuesta, de acuerdo con expertos de San Cayetano, podría estar en fomentar programas de capacitación y acompañamiento técnico que aprovechen el alcance de las plataformas digitales, pero con información verificada y adaptada a las condiciones locales.
