Especialistas inmobiliarios señalaron que, para hacer frente a la gentrificación, es necesaria la integración y participación de todos los actores del sector para atender diversos aspectos, como el aumento en la oferta de vivienda
En las últimas semanas, la gentrificación ha sido un tema controversial, especialmente en la Ciudad de México. Diversos capitalinos se han manifestado en contra de este fenómeno, lo que llevó a las autoridades a anunciar una política para atender la problemática: el Bando 1. Pero, ¿esta iniciativa realmente es la solución? Expertos en el sector inmobiliario compartieron su postura.
Durante el foro ‘Gentrificación, la visión de los profesionales inmobiliarios’, organizado por Centro Urbano, los especialistas destacaron que este fenómeno no obedece únicamente a la llegada creciente de extranjeros, nómadas digitales o a la pandemia, como lo han señalado algunos ciudadanos en las marchas antigentrificación. Explicaron que se trata de una problemática que lleva más de una década presente, como resultado de diversos factores del mercado inmobiliario.
Uno de los principales, indicaron, es la falta de oferta de vivienda. La Ciudad de México registra niveles históricos mínimos de desarrollo inmobiliario, debido a la escasez de suelo disponible. Esta situación ha elevado los precios de las superficies disponibles. A ello se suman los largos y complejos procesos burocráticos, que retrasan la construcción. Estos factores han provocado un aumento en los costos de la vivienda, lo que la hace poco asequible para la mayoría.
¿Cómo podría funcionar el Bando 1?
En contexto, Laura Zazueta, directora del Instituto de Administradores de Inmuebles (IAI), destacó que, para que una política pública como el Bando 1 atienda realmente esta problemática, debe contemplar diversos factores e incluir activamente a todos los participantes del sector, para trabajar en soluciones factibles.
“El tema es muy complejo. El gobierno tiene que analizar y trazar una política integral. Tiene que integrar a los constructores, con facilidad de tierra; a los desarrolladores con permisos. Tiene que provocar más departamentos, más vivienda para que podamos llegar a un libre mercado”, comentó.
En relación con ello, Horacio Urbano, presidente de Centro Urbano, destacó la necesidad de que el gobierno capitalino considere a todas las personas que participan de alguna forma en la ciudad, sin importar si habitan dentro o fuera de ella.
“Si quisiéramos atender el reto habitacional de la ciudad de México, tenemos que considerar a los que habitan aquí, a los que habitan los barrios tradicionales, a la migración de mexicanos que vienen de otros estados, a la migración de habitantes de la ciudad que buscan mudarse”, señaló.
Alejandro Kuri, ex presidente nacional de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), recordó que las medidas incluidas en el Bando 1 ya estaban contempladas en la legislación desde el año pasado.
“Cuando la Jefa de Gobierno anunció el Bando 1 era políticamente necesario porque parte de la población estaba notablemente enardecida y se podía crear un problema mayor si no se atendía rápidamente. Pero si analizas punto por punto lo que se anunció, el 90% de lo que dijo ya está plasmado en la ley desde hace meses, desde agosto a septiembre del año pasado. Ya está plasmado tanto en el Código Civil de la Ciudad de México, el Código de Procedimientos Civiles, la Constitución Política de la Ciudad de México. Todas estas nuevas reglas del juego ya están plasmadas en la ley, nada más las empaquetaron, vamos a decirlo así, y les pusieron un hombre: Bando 1”, indicó.
Por ello, los especialistas coincidieron en que el verdadero reto del GCDMX consiste en diseñar los instrumentos necesarios para desarrollar efectivamente dichas leyes y atender la oferta y demanda de vivienda.
Laura Zazueta ejemplificó que, así como la gentrificación cuenta con diversas causas, la política pública debe atender diversas problemáticas: brindar incentivos fiscales para los desarrolladores, impulsar una redensificación para diversificar las zonas de construcción y habitabilidad, impulsar la llegada de centro de trabajo en zonas donde se planea la construcción de vivienda, entre otros.
Finalmente, Felipe Cuevas, presidente de AMPI CDMX, destacó que la Asociación ha sostenido mesas de diálogo con la administración capitalina. En ellas, ofrecieron realizar un análisis histórico del mercado inmobiliario de los últimos años para definir acciones concretas, ya que, “es necesario revisar la historia, entender qué ha pasado, para saber qué se necesita hacer”.
