El titular de Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda del Gobierno de Distrito Federal reconoció que trabajan para aplicarlo en áreas de renovación urbana
Felipe de Jesús Gutiérrez, director de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) del Gobierno de Distrito Federal, reconoció que ya se trabaja en un esquema piloto de vivienda en renta para aplicarlo en la ciudad de México con instancias del Gobierno Federal e iniciativa privada.
“Estamos en fase de conceptualización y revisión normativa para hacerlo atractivo. Tenemos un nivel de acuerdos básicos con Infonavit, y se está buscando hacerlo en predios del propio gobierno de la ciudad como planes piloto. Estamos recuperando este antiguo hábito de la vivienda en renta que se fue perdiendo. Lo estamos trabajando también con Conavi y en algunos casos en combinación con la iniciativa privada”.
Gutiérrez reconoció también que este esquema se contemplaría a través de algunas áreas de renovación urbana donde la vivienda en renta pueda ser motor para la recuperación de la población que reconoció, sale a un ritmo de 100 mil habitantes por año de la ciudad con un promedio de 75 familias por día.
Dijo que inicialmente la población capitalina emigró a municipios como Tlalnepantla, Naucalpan, Atizapán o Ecatepec y que aún cuando se tiene la percepción que la ciudad está creciendo, en realidad está en proceso de reacomodo, así como las actividades económicas de la población, y que ahora la nueva migración se presenta hacia Huehuetoca, Tizayuca, Valle de Hidalgo y a lugares cada vez más remotos de la urbe.
Por la misma problemática, dijo que se requieren 40 mil viviendas nuevas al año y por lo menos 35 mil mejoramientos, sin considerar el rezago acumulado que es de 800 mil viviendas en la Ciudad, en algunos para mejorías, o sustitución, como en el caso de las viviendas en mal estado del Centro Histórico, que han presentado en las últimas semanas caídas por su avanzada edad.
“Se ha dejado de hacer vivienda social para el 75 por ciento de la población que gana menos de 5 salarios mínimos. El gran reto retener a esta población, arraigarla y mientras se ha suspendido la norma 26 en dos años, esto ha tenido como consecuencia que la población de menor capacidad económica se aloje en suelo de conservación, asentamientos irregulares, o hacia las periferias, a dos y tres horas de distancia”, argumentó.
Dijo finalmente que debido a una composición diferente en las familias de la ciudad, serán las nuevas necesidades en vivienda, ya que se tiene que tomar en cuenta que cada día hay más familias que son únicamente pareja, personas solas y población de la tercera edad que demanda una vivienda y equipamientos diferentes, pero que sigue siendo productiva.