Julio Miguel Silva, ex viceministro de vivienda colombiano, resaltó la labor de la Sedatu para México
En fechas recientes la autoridades federales de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Comisión Nacional de Vivienda y los Organismos Nacionales de Vivienda (Onavis) han tenido un fuerte acercamiento y trabajo con especialistas colombianos en el sector, país que se ha convertido en un referente para Latinoamérica en temas del sector.
Al respecto, el doctor Julio Miguel Silva, ex viceministro de Vivienda, Ministerio de Ambiente Vivienda y Desarrollo Territorial Colombia, indicó que “algo muy importante que pasó en el mercado de vivienda en el país es que hubo un reordenamiento institucional desde 2011 porque tenemos por primera vez un ministerio que se ha dedicado a los temas de vivienda, ciudad y desarrollo urbano”.
Destacó que con anterioridad los temas de vivienda estaban relacionados con los tópicos de medio ambiente “en una Reforma del gobierno central adelantada por el presidente Santos se tomó la decisión de darle una institucionalidad única y central en una sola entidad para que maneje todos los temas, aunado a ello, vino un apoyo presupuestal en estos temas lo que ha llevado a que en los últimos cuatro años se hayan hecho inversiones por más de cinco mil millones de dólares en temas de vivienda”.
Menciona que este tipo de modificaciones a nivel institucional, presupuestal y de políticas, representaron efectos positivos en la construcción de la vivienda, ya que en 2013 hubo una edificación de 250 mil viviendas formales “ya estamos muy cerca de llegar a una meta para lograr construir 300 mil viviendas por año con lo cual estaríamos igualando la formación anual de hogares con la construcción formal en el país y por tanto, estaríamos atacando de forma directa la conformación de nuevos asentamientos precarios en el país”, agregó Silva.
Respecto al sector vivienda en México, considera que esos cambios por los que pasó su país son los mismos experimentados por nuestro país con la creación de la Sedatu y confía en que habrá frutos a futuro.
“Un tema que deben trabajar es el de las familias vinculadas a la economía informal pues en México tienen relativamente fácil el acceso a instrumentos de financiación de la vivienda a hogares que están vinculados a la economía formal pero no los tienen los de la economía informal, quienes representan la mayoría entonces en la medida que no les demos instrumentos de financiación las ciudades seguirán creciendo en la informalidad lo que no es deseable”, complementó.
Además, resaltó la importancia de realizar un trabajo en los instrumentos que permita la financiación a hogares de bajos ingresos informales pero a la par en la oferta y “fundamentalmente en la generación de suelo urbanizable que nos permita construir vivienda asequible, entendiendo un precio promedio que no supere los 30 mil dólares”.
El trabajo conjunto realizado entre los Onavis, Sedatu, dependencias y la tendencia por generar indicadores que sustentes las decisiones de planeación de ciudad considera que “es el resultado de fortalecer institucionalmente el sector vivienda en la medida que tengamos unas instituciones desde el gobierno central más sólidas pues la institucionalidad del sector se mejora y empiezan a trabajar todos con un único ente rector de la política”, finalizó.
