La cúpula empresarial aplaudió la medida aplicada por Infonavit y el relanzamiento de Mejoravit
Con un valor de mercado superior a los 350 mil millones de pesos anuales, la industria de la Vivienda se encuentra en un momento histórico para replantear su visión, esto desde la óptica de “sacudir el mercado interno”, promoviendo el crédito y desregulando en toda la cadena productiva pero, no dejando de lado, evitar que la corrupción empañe a un sector que por méritos propios ocupa el segundo lugar dentro de las actividades productivas de este país, así lo dio a conocer La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) a través de un comunicado.
En nuestra Comisión estamos convencidos, de manera proactiva, en apoyar e impulsar la agenda anticorrupción que desde esta cúpula empresarial se promueve en todas las instancias legales, bajo la dinámica de mantenernos atentos y vigilantes para lograr una nación transparente y libre de prácticas que dañan su libre avance, detalla el anuncio.
Consideramos importante revisar los puntos finos inherentes a los tiempos de los procesos de desarrollo de vivienda y volver a establecer una ruta crítica que permita abatir tiempos y costos indirectos, sistematizarlos y establecer niveles de servicio normativos e institucionales.
Más aún, es claro que debe haber un trabajo integral en materia legislativa tanto en el ámbito federal como en lo estatal y municipal, donde participe el gobierno de la mano de la iniciativa privada y la sociedad civil para lograr eficiencia, combatir la corrupción y desarraigar malas prácticas.
En este marco de buscar la transparencia y rendición de cuentas, reconocemos el trabajo que se realizó en el Infonavit por su Director General David Penchyna y su equipo en el relanzamiento del programa Mejoravit con mejoras de control tecnológico, luego de que en febrero pasado fue suspendido por malas prácticas en su aplicación, por lo que estaremos atentos a los resultados que se obtengan ahora.
Finalmente, se estima que las familias mexicanas destinan 14% de sus ingresos a “pagos extraoficiales”, de allí que en la Coparmex levantemos la mano para señalar aquello que daña y perjudica a una industria generadora de empleos, de patrimonio y con un impacto favorable en el bienestar social.
