Se anclará a las familias a través de diversos servicios para que hagan comunidades: Coesvi
Carlos Borruel, director de la Comisión Estatal de Vivienda, Suelo e Infraestructura, (Coesvi), de Chihuahua, aseguró que el gobierno estatal está comprometido en recuperar viviendas abandonadas para beneficiar y dar los servicios necesarios a los nuevos habitantes.
Ya que con el acuerdo que establecieron el gobernador, Javier Corral, con el director general del Instituto Nacional del Fondo de Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), David Penchyna, se comprometieron a entregar al gobierno estatal 500 viviendas y una vez que sean rehabilitadas y vendidas, se entregarán otras 500, en lo que será un esquema revolvente.
Además, se darán créditos a agentes y empleados de la Fiscalía Estatal, brindarán opciones a derechohabientes de zonas rurales y otorgarán espacios al DIF Estatal, para sus funciones de beneficio a la comunidad.
“Con estas acciones se pretende evitar la creación de más desarrollos habitacionales, que terminan abandonados. Tenemos que cerrar la ciudad para no estar permanentemente en la recuperación de vivienda, su rehabilitación y en dos años otra vez tener casas deshabitadas”, dijo Borruel.
De lo que se trata, agregó, es romper un círculo vicioso, por lo cual se trabajará de manera coordinada con instituciones de salud y otras instancias de gobierno, para que exista atención médica, una comandancia de policía, tiendas de conveniencia, la existencia de rutas de camión, con la finalidad de anclar a las familias en esos lugares.
El funcionario estatal explicó que hay una política nacional que impide que se construyan desarrollos habitacionales en zonas en las que no hay servicios. Por lo que no se debe condenar a las familias de escasos recursos, que han adquirido un crédito de vivienda, a abandonarlas o devolverla por las malas condiciones en las que están.
“En los terrenos recuperados y que fueron reincorporados al patrimonio estatal, se hará un esquema donde el gobierno pondrá la tierra y los inversionistas construirán viviendas térmicas de buena calidad, amplia y cerca del centro de la ciudad.
“Queremos terminar con el mito de que la gente pobre tiene que vivir en las orillas, en las casas más chiquitas que se pueda y en las viviendas de la menor calidad posible, eso lo empezaremos el próximo año y serán 421 viviendas en las primera etapa”, concluyó.