Es el más grande de la Ciudad de México y el primero en la delegación Iztacalco
En Ciudad Deportiva, de la delegación Iztacalco, se inauguró el octavo Huerto Urbano de la capital del país, el cual destaca por ser el más grande, ya que consta de dos naves de 900 metros cuadrados cada una; además, se iniciará un proyecto para producir tilapias, en un promedio de 14,000 peces-carne al año, con la intención es que lleguen a los atletas del Centro Nacional de Alto Rendimiento.
La Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades (Sederec) es la encargada de los Huertos Urbanos con participación de diversas instancias, lo cual se suman los proyectos individuales en azoteas de hogares de habitantes de la Ciudad de México con producción de alimentos, los cuales se han desarrollado bajo las prácticas de agricultura urbana sustentable a pequeña escala.
Fue el jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera Espinosa, quien se encargó de la inauguración, durante la cual informó que los siete huertos urbanos instalados con anterioridad en la CDMX han arrojado una producción agrícola de 94 toneladas de alimentos en beneficio de casi 10,000 personas.
“Esta experiencia, que no estaba incluida en la Ciudad de México, hoy es una realidad, estamos hablando de ejemplos como París, Londres, Colombia y hoy la Ciudad de México ya (está) trabajando”, destacó Mancera.
Los Huertos Urbanos son un medio para la producción de alimentos que llegan a la población a través de diversos mecanismos, en particular, el de Ciudad Deportiva busca generar esquemas locales de comercialización a través de los cuales los vecinos adquieran los productos a precios muy reducidos.
“Tenemos que revolucionar nuestro esquema de pensamiento citadino para cambiarlo por uno de producción agrícola y pecuaria en la ciudad. Hoy la CDMX es la única en la República que cuenta con un Gabinete de Desarrollo Rural”, indicó al respecto Hegel Cortés Miranda, titular de la Sederec.
Por su parte, el jefe delegacional en Iztacalco, Aurelio Alfredo Reyes García, destacó la asesoría de la Universidad de Chapingo y la labor del Centro de Enseñanza Ambiental Mario Molina en materia.