Arquitectos y urbanistas discutieron el uso de la tecnología para construir una ciudad más incluyente y segura para los más de nueve millones de habitantes
En el marco de la Feria Internacional de las Culturas Amigas (FICA) 2019, que se realiza en el Bosque de Chapultepec, se llevó a cabo el conversatorio ‘Ciudad, espacio público y utopías’, donde arquitectos y urbanistas analizaron el uso de la tecnología en la construcción de una Ciudad de México más incluyente y segura para sus más de nueve millones de habitantes, así como para las cinco millones de personas que habitan en la zona conturbada que diariamente se trasladan a la urbe para trabajar y/o estudiar.
En el conversatorio, el arquitecto Juskani Alonso Herrera señaló que la tecnología debe estar al servicio de la humanidad, así como aportar información y contribuya a la obtención de recursos para construir una mejor ciudad. “De lo contrario, como arquitectos tendremos un entendimiento parcial”, expresó.
Por otro lado, el arquitecto Andrés Dionisio declaró que el uso y abuso de la tecnología está generando que las personas se vuelvan más distantes unas de otras, además de que se suman consumos de energía que pueden ser nocivos para la salud.
Por su parte, el arquitecto Ulises Paniagua opinó que la tecnología no va a resolver la problemática de la exclusión en la Ciudad de México, pues es más bien un problema epistemológico y ontológico. “Tenemos derecho a la memoria, hay que reconstruir nuestra identidad y formar una ciudad que sea segura para mujeres y niños. Aprender que las políticas públicas deben ser forjadas desde la comunidad”, precisó.
Durante el conversatorio, los especialistas estuvieron de acuerdo que el espacio público también es un factor importante para la construcción de una ciudad incluyente, al señalar que se debe trabajar para que la metrópoli sea un espacio donde se construyan comunidades.
Al respecto, Tashai Pineda García, especialista en vivienda en la Ciudad de México por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), detalló que la base para lograrlo se encuentra en la educación y la descentralización de los servicios.
“Es un proceso extenso y aunque es un camino que ya hemos andado largo trayecto, debe ser generalizado, analizado y visibilizado. El espacio público puede transformarlo todo”, concluyó.
