Tras el sismo del pasado 19 de septiembre se convocó a 50 arquitectos, a quienes se les asignaba una familia de Ocuilán, Estado de México, para que trabajara con las necesidades particulares de cada una
Tras el sismo del pasado 19 de septiembre se convocó a 50 arquitectos, a quienes se les asignaba una familia de Ocuilán, Estado de México, para que trabajara con las necesidades particulares de cada una