El Estado de México tiene que invertir en más infraestructura; Canadevi pide resolver primero la movilidad antes de ofrecer vivienda barata
Con el último censo que realizó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) se descubrió que el Distrito Federal es una de las entidades que tiene el mayor número de emigrantes y dentro de ese rango, ocho de cada diez se van al Estado de México.
Municipios como Ecatepec, Coacalco, Ixtapaluca y Tecámac son donde más viviendas se han construido y donde mayor cantidad de gente nueva llega a vivir, aunque en el caso de los dos últimos presentan el crecimiento poblacional más grande de América Latina en la última década.
Según información del Consejo Nacional de Población (Conapo) en este 2014 el Distrito Federal tiene 8 millones 774 mil habitantes, mientras que el Estado de México 16 millones 618 mil personas.
Comparando con el último censo del Inegi en 2010, el territorio mexiquense registró un aumento de un millón 443 mil personas, mientras que la capital descendió su número de habitantes en 77 mil personas.
Uno de los principales motivos por lo que las familias optan por dejar la capital es por el alto precio de la renta de una vivienda y muchos optan por ahorrar esa cuota y adquirir una casa accesible en el Estado de México.
Isaac Memun Elías, presidente de la Canadevi Valle de México, consideró que antes de ofrecer vivienda más económica a las personas y así, vuelvan a la capital, se tiene que priorizar el tema de la movilidad.
“Hay mucha gente que se salió debido al gran desarrollo de vivienda en el Estado de México y el reto que tenemos es darle a toda esta gente nuevo transporte público. El secretario Jorge Carlos Ramírez Marín está muy consciente de ello, al igual que el gobernador Eruviel Ávila, que se tiene que hacer una inversión muy importante en movilidad”.
Agregó que “algunos se están regresando por ese problema, porque el transporte se ha vuelto más complicado cada día, porque no hemos hecho la inversión necesaria”.
Respecto al costo alto, Memun Elías mencionó que las personas también dejaron el Distrito Federal por la aspiración de “tener más calidad de vida, estar en un fraccionamiento con áreas verdes y con servicios”.
De todas formas, el costo de la vivienda influye y por ello, crece la población en territorio mexiquense. “Entre más nos acercamos a la ciudad de México la tierra es más cara y también el precio de la construcción. En zonas con Tecámac, Huehuetoca y Zumpango hay muy buena oferta de vivienda de todos los precios, pero principalmente social”.
Finalmente, para el titular de la Canadevi VM no se puede pensar en volver a poblar la capital, ya que “todavía tenemos un rezago de vivienda, de alrededor de 800 mil en todo lo que es el Valle de México”.
Crecimiento a ritmo veloz
José Rodrigo Fajardo, director general de Planeación Urbana de la Secretaria de Desarrollo Urbano del Estado de México, dio a conocer que esta migración de la población ha provocado una mayor inversión en infraestructura, ante la necesidad de nuevas zonas urbanas.
Con más de 15 millones de habitantes, mismos que representan 13.5% de la población a nivel nacional, el Gobierno estatal reconoce que tiene mucho trabajo por realizar, pero la situación se complica cada año, cuando cerca de 200 mil habitantes se asientan en el territorio mexiquense.
“Estamos hablando de un promedio de crecimiento durante la década anterior de 200 mil habitantes nuevos por año a raíz de los cursos migratorios y del crecimiento natural. Este número equivale a la creación de una ciudad media cada año, implica la demanda de suelo urbano con las características necesarias y obliga a los autores de los tres órdenes de Gobierno a estar inyectando recursos”.
A comparación del Estado de México, la capital del país vive un decrecimiento, ya sea por la falta de espacio o el precio excesivo, tanto para pagar una renta o adquirir una vivienda, y muchas de estas personas buscan espacio en los alrededores.
“El Distrito Federal cada vez tiene menos habitantes. De acuerdo con los datos de los censos, la mayor parte de esta gente se ha venido reduciendo porque buscan espacios en esta entidad ante las oportunidades recibidas y esto nos compromete”, indicó.
Guadalajara sufre mismo problema; Querétaro es caso contrario
Alejandro Nieto, subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda de Sedatu, dio un ejemplo de la situación similar que se vive en Guadalajara, donde se han abandonado muchas viviendas.
“Guadalajara perdió 150 mil habitantes en su zona central durante los últimos años. O sea, que si se van al interior de esa zona se van a encontrar viviendas vacías. Ahí está el negocio, en la renta y reconversión de zonas industriales”.
El Funcionario señaló que a su parecer el modelo de producción de vivienda que se ha venido haciendo en el país, del modelo horizontal y un solo piso, es una etapa que ya se acabó.
La capital de Querétaro vive todo lo contrario, ya que se ha convertido en una ciudad que recibe a muchas empresas, por lo que su población ha ido en aumento y por ende, la construcción de vivienda también.
La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción de la zona calificó como positivo el incremento poblacional, ya que ha favorecido directamente a las empresas constructoras, tanto para la edificación de viviendas y afirmó que para finalizar el año esperan un repunte de mil 500 millones a los 900 millones de pesos.