De acuerdo con el MIT, México es el segundo país más contaminante de Latinoamérica, y la CDMX tiene pocas políticas públicas que contrarresten esto
En los últimos años, se ha vuelto imperativo adoptar prácticas sustentables en el sector inmobiliario para reducir el impacto ambiental. Y en México hemos visto ejemplos de estrategias como el uso de energías renovables y materiales ecológicos en los desarrollos; así como el impulso de instrumentos de financiamiento verdes.
Sin embargo, durante el panel Innovación tecnológica y sustentabilidad, que se realizó en el marco de la Expo Desarrollo Inmobiliario: The Real Estate Show 2023, de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI), Cristina Gamboa, directora ejecutiva del World Green Building Council (WorldGBC), indicó que México aún tiene un gran trabajo por hacer en el futuro para adoptar las tendencias que se observan en países de Europa o Estados Unidos en materia de sustentabilidad.
La experta expuso que, si bien el sector inmobiliario es parte de las causas de la crisis climática actual, también forma parte importante de las soluciones.
“No vengo a convencerlos de que estamos agotando la naturaleza, nos queda el 45% de la diversidad que había hace 20 años; tampoco vengo a decirles lo que está pasando con el cambio climático, que hay una crisis de agua y energética. Pero hay una tendencia en la que seguimos haciendo lo mismo, se nos olvida que en el pico del Covid-19 murió 1 millón de personas, y con el cambio climático mueren más de 5 millones de personas cada año. Ustedes, como desarrolladores, tienen un gran brazo de generación, está en sus manos el impacto que tengan las inversiones que hagan”, aseveró.
Gamboa agregó que aquellos que buscan comprar o rentar inmuebles ya se inclinan por activos que ofrezcan una mayor calidad de vida y que integren estrategias sustentables, como ahorro de energía y agua.
Asimismo, comentó que en el real estate global ya se comienzan a ver compromisos con la edificación sostenible para reducir las emisiones de carbono a la mitad para 2023. México no ha sido la excepción, y los desarrolladores se han comprometido a reducir en un 50% las emisiones para 2050; no obstante, la experta afirmó que en el país no se exige el cumplimiento de las normas en la materia.
De igual manera, la directora del WorldGBC señaló que otra de las tendencias que se prevén para el futuro es que, para que los activos inmobiliarios sean competitivos en el mercado en 10 o 15 años, tendrán que incluir estrategias ASG (Ambientales, Sociales y Gobernanza).
“La inversión en ASG es fundamental, no van a ser competitivos si no están ya en esa etapa. Los recursos están, pero solo van a ir a portafolios que tengan transparencia y activos que ayuden a combatir el cambio climático y generar mejor calidad de vida”, concluyó.
Por su parte, Juan Huicochea, analista e investigador en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), aseguró que México es el segundo país más contaminante de Latinoamérica, después de Brasil, y la Ciudad de México tiene pocas políticas públicas que contrarresten esto.
El analista detalló que, en Estados Unidos, por ejemplo, el objetivo para 2050 es mitigar sus emisiones de gases efecto invernadero en un 90%, y para ello han puesto en marcha diversas estrategias que se podrían adoptar en México; entre las cuales destaca el desarrollo de políticas públicas para la reducción de emisiones de la industria inmobiliaria.
