La empresa yucateca quiere estar presente en el desarrollo de infraestructura residencial, comercial y de oficinas
El proyecto del Tren Turístico Transpeninsular, mejor conocido como Tren Maya, es visto por Inmobilia -la empresa yucateca que recientemente apostó en la Bolsa por el sureste- como una gran oportunidad para el turismo y los desarrolladores inmobiliarios, por lo que estarán atentos a las oportunidades que se abran con dicho proyecto.
En conferencia de prensa, luego de la ceremonia de la primera emisión de la firma en la Bolsa Mexicana de Valores de un Certificado de Capital de Desarrollo (CKD) por un monto de 6,000 millones de pesos, Roberto Kelleher Vales, director general de Inmobilia dijo que se trata de una buena estrategia que detonará varios sectores en la región.
«Nosotros en nuestro CKD no estamos en posibilidades de invertir en ese tipo de infraestructura, pero lo que queremos es que siga llegando más turismo y se siga teniendo mucha más movilidad. Estamos convencidos de que esto a la región sureste le va a beneficiar», declaró.
Agregó que actualmente está llegando una cantidad muy importante de pasajeros, principalmente extranjeros, y calcula que si en promedio «vienen 25 millones de turistas a Yucatán y se logra captar el 10% que se interese en toda la parte maya, Calakmul, toda la parte de Chiapas, Oaxaca, el turismo será un generador de recursos para la zona».
«Lo que nosotros queremos hacer como desarrolladores es estar presentes en toda la infraestructura urbana que se requiera tanto residencial, comercial, de oficinas, esto es lo que queremos», enfatizó Kelleher Vales.
Destacó que la realidad para la primera parte del Tren Maya que va de Cancún a Tulúm, donde se tienen contempladas 7 u 8 paradas y los traslados pueden tardar hasta una hora con 20 minutos, «no es un proyecto nuevo, es algo que se requiere hacer porque el turismo sigue incrementándose».
Para la región sureste se está promoviendo cambiar varias de las delegaciones federales; Mérida sería la sede de la Semarnat, en Campeche se alojaría una parte de Pemex y la Secretaría de Energía a Villahermosa, además de mover la Comisión Federal de Electricidad (CFE) a Tuxtla Gutiérrez, de acuerdo con el directivo.
«El pipeline que tenemos no está etiquetado a determinados proyectos, mientras se vaya comprometiendo el capital tendremos la obligación de invertir en esos proyectos pero al final del día es un pipeline que buscará aprovechar las oportunidades que se van presentando en el mercado. En ese sentido si se generan nuevas oportunidades que hoy en día no tenemos contempladas podemos incluir proyectos que no estamos analizando», puntualizó Mauricio López Rivera, director general adjunto de Inmobilia.