Residencial Toreo ofrece un proyecto arquitectónico que cuenta con calentador solar y captación de aguas pluviales
Ubicado al norte de la Ciudad de México, Toreo Residencial es un desarrollo de Grupo Reside, que busca ofrecer a sus habitantes y compradores distintas amenidades dentro del lugar donde viven, además de integrar elementos sustentables para minimizar su impacto en el medio ambiente.
Néstor Hernández Hernández, subdirector de Operación Inmobiliaria del Residencial, explicó que se trata de un complejo con 252 departamentos, repartidos en cuatro torres de ocho niveles cada una, además cada departamento cuenta con dos cajones de estacionamiento; también hay zonas para gimnasio, juegos infantiles, zona para mascotas, gimnasio, salón de usos múltiple y biciestacionamiento.
El área de construcción es de alrededor de 38,260 metros cuadrados, donde frecen cuatro prototipos de departamentos, uno de 88.25 metros cuadrados, otros de 72.11 ya sea con tres o dos recámaras, y uno de 62.41 metros cuadrados.
Hasta ahora se ha entregado una torre, la siguiente está planeada para concluirla antes de abril y todo el Residencial se prevé que esté terminado en noviembre de 2019. El costo de los departamentos disponibles está entre los 2,654,000 y 2,986,000 de pesos.
Destacó la infraestructura urbana de la zona, pues hay varias tiendas de autoservicio, lugares de entretenimiento, restaurantes y cuenta con acceso a diferentes rutas de transporte.
“En nuestra época no puedes desarrollar un proyecto arquitectónico si no es sustentable, principalmente por el tema ecológico y económico”, aseguró Néstor Hernández, por lo que explicó que en el desarrollo se instaló un calentador solar por cada departamento “es un sistema de calentador solar complementado por un calentador de paso, lo que genera ahorro de gas y, por lo tanto, económico”.
También cuenta con un sistema de captación de agua pluvial, que contempla una cisterna de 366 metros cúbicos que “dirigirá toda el agua captada de las azoteas y patios a unas cisternas con un tratamiento para poderla ocupar dentro de los departamentos”. Indicó que el tratamiento consta de cuatro pasos: un filtro hidrodinámico que deshecha los sólidos que pueda haber en el agua; después un proceso de carbón activado, el cual quita todo olor, sabor y color al agua; la suavización elimina ciertos minerales en el agua para finalmente utilizar el paso de la luz ultra violeta, que ayuda a eliminar las bacterias que aún pueda tener el agua.
De igual forma, cuentan con una planta de tratamiento que recolectará el agua residual de todas las torres para ser tratada por medio de procesos bioquímicos y posteriormente utilizarla para riego, lavado de autos y de áreas comunes.
Además, en estas zonas se instalaron fotoceldas para que solo enciendan durante la noche, además de tableros con control de horarios que permiten utilizar la iluminación por la noche solo en zonas de circulación para ahorrar energía, mientras que la iluminación en estacionamiento será por sensores.
En el sótano se cuenta con un sistema de ventilación extracción, controlado por sensores de CO2, para entrar en funcionamiento cuando detecte altos índices de él.
A su vez, Néstor Hernández comentó que el único inconveniente con el que se encontraron fue el tráfico de la zona, pero que el predio se encuentra en buenas condiciones.
Finalmente, expresó que la construcción de este tipo de desarrollos trae muchas ventajas tanto para los que compren en él como para los que ya habitan en el entorno, ”a nosotros como desarrolladores, para poder hacer este tipo de conjunto, las normas nos indican que debemos hacer ciertas adecuaciones y obras de infraestructura, con la finalidad de garantizar los servicios del nuevo desarrollo y los de los vecinos”. Por ello indicó que ya se han realizado obras de agua, drenaje y gas natural; este último aún no llegaba a la zona, por lo que ahora los vecinos están en proceso de gestionar que con la línea que alimenta a Residencial Toreo ellos también puedan tener dicho servicio.
“Los desarrolladores tenemos dos opciones, una es pagar lo que corresponde en derechos a la Secretaría de Finanzas y que ellos decidan que hacer con ese dinero, o por la que optamos nosotros, una relación sustitutiva, en la cual nos acercamos a la delegación y que nos diga las obras que se requieren en la zona para mejorarla”. Con esto indica que pueden estar seguros de en que se aplican sus recursos, además de poder garantizar que se contará con el servicio que ofrecen sin afectar a los vecinos.