Las personas deben invertir en un hogar para generar un patrimonio y no enfrentarse a la alza de precio con el tiempo
David Hoffs, director de estrategias en Quiero Casa, aseveró que en la Ciudad de México se mantiene la demanda de vivienda media y asequible, sobre todo en los matrimonios y las personas que buscan un nuevo hogar.
“La necesidad sigue siendo la misma que había antes, sin embargo se enfrentan con que los precios de la tierra incrementan y la oferta cada vez es menor, entonces eso complica a que las personas que buscan una vivienda la puedan obtener”, comentó en entrevista con Desde Centro Urbano.
Puntualizó que hay factores de incertidumbre como las elecciones, porque hace que no quede claro qué tipo de obras se pueden construir, en dónde y cómo se van desarrollar, por ello esto puede inhibir la oferta y complica el mercado.
Además, indicó que los clientes que buscan una vivienda, quieren estar seguros de que compran un buen lugar, seguro, eficiente y de forma legal, que no van a tener problemas, “esta es una incertidumbre que también les afecta”.
Destacó que si es posible desarrollar vivienda alcanzable, con sistema de transporte cerca, “para hacerlo hay que encontrar normalmente zonas que se puedan reconvertir, hay delegaciones como Iztacalco o Iztapalapa que tienen acceso a medios de transporte, en donde es posible trabajar en predios de la zona para ofrecer productos muy dignos de la región y de buena calidad”.
Detalló que hay viviendas que se pueden adquirir con valor desde los 750,000 y 800,000 pesos, con dimensiones mínimas como podrían ser 55 o 60 metros cuadrados, que son habitables, “este precio se puede encontrar en aquellas alcaldías que no han tenido procesos tan profundos de desarrollo y que cuentan con tierra disponible, pero que están al mismo tiempo cerca de las fuentes de transporte”.
Comentó que un ejemplo es la delegación Iztacalco, la cual anteriormente era una zona industrial y que actualmente ha cambiado con obras de vivienda, en donde también se ha construido infraestructura de transporte y que se vuelven ubicaciones muy nobles para desarrollar viviendas de este tipo.
Sin embargo, expresó que existe la expectativa de que el próximo año los valores mínimos serán de un millón de pesos y no de 800,000, por varios factores como la complicación del mercado y el incremento de los costos de construcción.
Resaltó que en la capital es importante adquirir una vivienda lo más pronto posible, porque el precio va a subir y no se tiene el respaldo de una moneda estable, “La inversión en un bien raíz es una acción que permite generar un patrimonio, nunca se ha de retrasar y menos en zonas urbanas en donde los precios siempre van a la alza, en una ciudad como la capital que siempre va creciendo y desarrollándose”.
Además, resaltó que las tazas de crédito están históricamente bajas y por ello son muy buenos momentos para comprar la vivienda y hacerse de un patrimonio.
Puntualizó que el ingreso mínimo de forma mancomunada, para tener una casa de ese valor, debe ser entre 25 mil pesos, para obtener un crédito para una vivienda de este nivel. “Los bancos están ávidos de colocar, hay mucho canales, en general han establecido estrategias para buscar la manera de acreditar a personas”.
Refirió que estas personas no necesariamente tienen un sueldo vía nómina y por ello buscan estrategias para personas que no pueden comprobar sus ingresos, “también hay instituciones financieras que se dedican a ese mercado en particular intentando tener a las familias mexicanas que no tienen manera de comprobar sus ingresos y sin embargo son gente muy responsable con sus ingresos y que puedan adquirir una vivienda”.
Finalmente, manifestó que en términos urbanos, para producir una ciudad más eficiente, la primera cosa que se debe trabajar es simplificar la normatividad de tal manera que sea más entendible, y brinde seguridad entre los vecinos, además de que el sector privado tenga la certidumbre de realizar una inversión.
La segunda acción es buscar que el uso del suelo sea mixto entre viviendas y comercios, para tener una interacción urbana, y el tercero se refiere a tener productos donde se puedan mezclar la sociedad a cambio de ser una mayor densidad, “hay que trabajar el cómo captar el cambio de esta mayor densidad, pues el valor que el desarrollo trae es para generar una mejor calidad de vida”.